Por Prof. Joaquín G. Puebla
En la mitología griega, Medusa (en griego antiguo Μέδουσα Médousa, ‘guardiana’, ‘protectora’) era un monstruo ctónico (En mitología y religión, y en particular en la griega, el término ctónico – del griego antiguo χθόνιος khthónios, ‘perteneciente a la tierra’, ‘de tierra’ designa o hace referencia a los dioses o espíritus del inframundo, por oposición a las deidades celestes. A veces también se los denomina telúricos del latín tellus) femenino, que convertía en piedra a aquellos que la miraban fijamente a los ojos. Fue decapitada por Perseo, quien después usó su cabeza como arma hasta que se la dio a la diosa Atenea para que la pusiera en su escudo, la égida. Desde la antigüedad clásica, la imagen de la cabeza de Medusa aparece representada en el artilugio que aleja el mal conocido como Gorgoneion.
Medusa era originalmente una hermosa doncella, “la celosa aspiración de muchos pretendientes” y sacerdotisa del templo de Atenea, pero cuando fue violada por el “Señor del Mar”, Poseidón, en el mismo templo, la enfurecida diosa transformó el hermoso cabello de la joven en serpientes.
Psicoanálisis: En 1940 se publicó póstumamente el artículo de Sigmund Freud: “Das Medusenhaupt” (‘la cabeza de Medusa’), en el que sentó las bases para un cuerpo de críticas sobre el monstruo. Medusa se representa como “el talismán supremo que proporciona la imagen de la castración —asociada en la mente del niño con el descubrimiento de la sexualidad materna— y su negación”. Los psicoanalistas continúan con la crítica arquetípica en la actualidad. Beth Seeley analizó el castigo de Medusa por el “crimen” de haber sido violada en el templo de Atenea como un resultado de los conflictos no resueltos de la diosa con su padre, Zeus.
Feminismo: En el siglo XX, las feministas revisaron las apariciones de Medusa en la literatura y la cultura modernas, incluyendo su uso como logotipo de la marca de ropa Versace: Mary Valentis y Anne Devane señalan que cuando preguntaban a las mujeres cómo les parecía que era la ira femenina, siempre era Medusa, el monstruo mitológico con serpientes en la cabeza, lo que les venía a la mente, aunque ninguna de las mujeres que entrevistaron podía recordar los detalles del mito.
No es casualidad que hable de Medusa y ponga el rostro de la Intendente de La Matanza, Verónica Magario porque, a simple vista y haciendo un análisis muy superficial de la administración local, vemos que Magario muestra dos caras: una simpática, atenta y comprometida con la realidad social de los vecinos del distrito y, la otra, de una mujer que se desentiende de los compromisos asumidos y realizando actos que se contraponen con sus manifestaciones públicas.
Hay infinidad de testimonios que refrendan lo expuesto, muchos militantes y dirigentes del oficialismo local han sido “manipulados exitosamente” por la Medusa matancera, dado que al mirarla fijamente se han quedado de piedra al ver que se desentendía de los compromisos asumidos.
Verónica Magario, en privado, es una persona razonable, a la que se puede abordar y discutir seriamente los problemas del distrito, mostrando una sensibilidad especial ante las problemáticas sociales y que propone y asume compromisos. Después de reunirse con Verónica Magario uno se va con la sensación de haber logrado algo, pero al cerrase la puerta, si uno la conoce, sabe positivamente que ha perdido el tiempo porque la Intendente de La Matanza se olvidará inmediatamente de todo lo conversado y acordado, pasando al siguiente punto de la agenda que, seguramente, será “engatusar” al que sigue en la lista.
No hablo “a boca de jarro”, lo digo por experiencia propia, he hablado varias veces con Verónica Magario y fueron conversaciones profundas donde le adelanté información sobre la gestión municipal, le comenté las macanas que se mandaban algunos y los chanchullos de otros, conversamos sobre políticas públicas y le expliqué, detenidamente, la posición editorial de Semanario “Quinto Poder”.
La primera vez que hablé seriamente con ella fue apenas asumió como Presidente del HCD matancero y en ese rol, la entreviste en varias oportunidades para el matutino para el cuál trabajaba y para el canal de televisión donde tenía un programa; el resultado de esas primeras charlas fue un “apriete” telefónico para que revelase las fuentes sobre una nota que había publicado y que a ella no le gustó. Obviamente ante mis reiteradas negativas fue subiendo el tono de las amenazas, al no poder doblegar mi postura cortó el teléfono y supe, en ese mismo momento, que mis días en el matutino en el cual trabajaba estaban contados.
No me arrepiento de no haber accedido a sus presiones dado que su gestión para mi alejamiento del diario NCO me sirvieron para construir Semanario “Quinto Poder”, que de a poco se fue convirtiendo en un éxito editorial y comercial.
Después volví a conversar largamente con ella, a instancias de Fernando Espinoza, semanas antes de las elecciones PASO del año pasado y de las elecciones generales que la consagraron como Intendente del distrito.
En esas tres entrevistas exclusivas, hablamos largo y tendido sobre muchas cosas del distrito, no me atreví a aconsejarla, solamente, puse sobre la mesa una serie de temas que deberían ser considerados, en forma urgente, por la futura administración municipal. Lo interesante de todo esto es que ella coincidió conmigo en muchas de las valoraciones que hice y hasta tuvimos un debate enriquecedor sobre varios temas. Me fui con la sensación de haber logrado algo, en desmerito de las futuras investigaciones del medio, pero me pareció más prudente colaborar en la construcción de soluciones que en las primicias que podría publicar.
Obviamente nunca puso en agenda ninguno de los temas hablados y, aun menos, nunca más volvió a atenderme el teléfono (tampoco es que la llame mucho), pero “por las dos chirolas que perdí” me ahorre un tiempo considerable que hubiese tardado en darme cuenta de sus dos caras.
No escribo esto desde el rencor ni nada parecido, cada uno es como es y vive como puede, simplemente, lo cuento a modo informativo para que sepan que conozco el paño.
LA MEDUSA EN ACCIÓN
Hay muchísimos ejemplos de lo que sostengo pero el más reciente es con respecto a la presentación hecha ante una fiscalía matancera pidiendo un amparo ante los brutales aumentos de los servicios públicos (http://www.latecla.info/4/nota.php?nota_id=76052). Coincido con ella en la postura pero sé positivamente que, realmente, le importa poco el tema. Fue un “acting” (interpretación de expresiones o frases similares a las que los modelos tendrán que hacer o decir en un spot publicitario. Interpretación que las modelos realizan al caminar) para la prensa y una excusa para salir en cuanto canal o programa de TV que la convocó.
¿Por qué sostengo esto?, es simple y el Frente Renovador matancero se lo hizo recordar públicamente al exigirle que “Derogue el aumento de impuestos aplicado por Fernando Espinoza antes de dejar la jefatura del municipio, en diciembre pasado…Que anulen el aumento del 50% en la tasa de Servicios Generales y del 30% en la de Seguridad e Higiene”. El Concejal Fernando Asencio sostuvo que “Teniendo en cuenta que Magario entiende que la situación social no da para más, también tenemos que mirar para adentro y derogar este impuestazo. Esperemos que el PJ nos acompañe” (http://m.lapoliticaonline.com/nota/98221-el-massismo-le-pide-a-magario-que-derogue-el-impuestazo-que-dejo-espinoza/).
No ando tan desacertado en lo que digo sino veamos las prioridades de la administración municipal si analizamos la última Rendición de Cuentas, que fue aprobada por solo un voto.
La oposición salió a marcar la cancha y exhibió la siguientes cifras “De acuerdo a la información recolectada por el bloque massista, el presupuesto original de La Matanza para el año pasado era de 3200 millones de pesos, pero sufrió una variación que duplicó los fondos y se terminó presentando una rendición por 6500 millones. A Salud, le habían presupuestado un 27% y le terminaron asignando un 17%. Habían previsto asignarle 864 millones y le dieron 1150 millones. Es decir, le aumentaron el dinero pero a casi la mitad de lo que habían previsto originalmente. A Medio Ambiente directamente le bajaron los recursos un 28%. Habían previsto darle 13 millones y le dieron 9 millones y medio. Lo mismo a las delegaciones municipales, le quitaron el 33%. Le habían asignado en principio 15 millones y les repartieron 10 millones. 
A Protección Ciudadana, que se encarga de seguridad en el distrito, le habían asignado un poco más del 8% y le terminaron girando poco más del 5%. Lo mismo que a Salud: le terminaron asignando un poco más de dinero pero en porcentaje es mucho menor al que se había previsto originalmente. En cambio, las áreas que más aumentaron en la variación que se registra del presupuesto inicial al finalmente ejecutado, fueron las de Obras públicas y Servicios Públicos (más del 400%), de Ciencia y Tecnología (1090%), Planeamiento Urbano (800%)”.
Otro caso de palabras comprometidas y hechos contradictorios es cuando salió a sostener que “El municipio de La Matanza dejará de pagar el alumbrado público para abastecer los comedores” (http://infogei.com.ar/cable/18094/el_municipio_de_la_matanza_dejara_de_pagar_el_alumbrado_publico_para_abastecer_los_comedores/), cuando todo el mundo sabe que el municipio, desde hace muchos años, no paga el alumbrado público porque el costo del mismo se suele compensar con el impuesto que se le cobra a Edenor por el uso del espacio aéreo (es decir, el tendido eléctrico), salvo en el 2001 donde hubo un importante desfasaje que obligó, al entonces Intendente Alberto Balestrini, a negociar con la empresa y eximirla del pago de parte del impuesto de Seguridad e Higiene. 
La Intendente Verónica Magario hace este anuncio (de no pagar el alumbrado público) teniendo un as en la manga: Fernando Espinoza, antes de ser asesor estrella del municipio, es decir, cuando era Intendente, le adjudico a Edenor, por contratación directa, una obra de 500 millones de pesos para el reemplazo del cableado de alta tensión en la zona sur del distrito. Dicha obra fue adjudicada en 2014 y el estado municipal recibió el dinero de nación para esa misma época y fue ingresado como Rentas Generales en las cuentas municipales (habría que preguntarle a los Contadores Nigro y Amato, secretario y subsecretario de Hacienda en esa época cómo fue la maniobra financiera) y, después de un año, se comenzó la obra.
Obviamente después un año y con una inflación del 25% promedio, los costos no eran los mismos y Edenor solamente hizo hasta donde le alcanzó la plata, es decir, si debían hacer 10 metros (a modo de ejemplo) solo hizo 6 metros. Obviamente Edenor comparte y hace silencio ante el anuncio porque “Entre bomberos no nos vamos a pisar la manguera”.
LA MEDUSA EN LA POLÍTICA
Verónica Magario ha tomado impulso en su carrera política y hasta esta opacando a su esposo (según declaraciones del ex Gobernador bonaerense, Daniel Scioli; situación que no fue aclarada ni desmentida por los protagonistas) Fernando Espinoza quien ha comenzado a guardar un cauto silencio después de varios exabruptos que lo han puesto en la mira del gobierno nacional y provincial.
Magario no ha tenido empacho en meterse en la interna del PRO y salió en defensa de la gobernadora, María Eugenia Vidal.
“Para la intendente de La Matanza, Macri ‘no cuida’ a Vidal” (http://www.diariopopular.com.ar/notas/248614-para-la-intendente-la-matanza-macri-no-cuida-vidal), ese es el titular de la nota y Magario declara que “No entiendo cómo es posible que Mauricio Macri no cuide y no defienda a María Eugenia Vidal, su gobernadora más importante y de su propio partido”. Esto lo que sostiene en público pero en privado, en un encuentro con la militancia del PJ matancero, la Intendenta Verónica Magario tuvo duros conceptos sobre la gestión de la Gobernadora Vidal y dijo que “Es muy amable, muy macanuda, pero que no resuelve nada…”.
LA MEDUSA QUEDANDO AL DESCUBIERTO
A principios de junio se realizó una multitudinaria marcha bajo la consigna “Ni una Menos” y la Medusa matancera se hizo presente y declaró que “Hoy es cada vez más difícil para las mujeres que sufren de abuso familiar, o maltrato por parte de su pareja, salir de la dependencia que enfrentan en materia económica. La falta de trabajo formal y la pérdida de los empleos informales, son un caldo de cultivo para la generación de violencia en el seno familiar” .
(http://www.veronicamagario.org/2016/06/03/niunamenos/), pero a pesar de su compromiso público y después de haber ocupado importantes cargos en el ejecutivo municipal, después de haber sido Presidente del HCD matancero, después de haber pasado (sin pena ni gloria) por el congreso nacional como Diputada y ser actualmente Intendente del municipio más grande e importante del país, Verónica Magario nunca se hizo eco de los numerosos proyectos presentados para crear un ámbito municipal que de contención a las mujeres y sus hijos víctima de las violencia familiar.
La Intendente matancera esta tan preocupada por el trabajo que aún no tuvo tiempo de rever el caso de Natalia Mabel Ayala (Leg. 28863), que fue despedida de su trabajo en el Hospital de Niños de San Justo (https://semanarioquintopoder.com/?p=12250) sin justificación ni causa aparente, como oportunamente informamos, siendo que Ayala en madre de cuatro hijos.
Verónica Magario es una ferviente defensora de la educación pública y de la Universidad Nacional de La Matanza y participó de varios actos en la misma. También fue parte, durante la gestión de Fernando Espinoza, de la inauguración de la sede de la UNLaM en González Catán (http://www.diariopopular.com.ar/notas/171847-universidad-catan). En dos sendos actos se entregaron 220 millones de pesos para construir la sede mencionada (primero 70 millones y, en un acto posterior, 150 millones de pesos) 
pero dicho dinero nunca se ingresó a las arcas de la UNLaM y, últimamente, ante la negativa de las autoridades universitarias de seguir avalando dicha sede se comenzó a tantear la posibilidad de que se instale en dicho predio la UTN (Universidad Tecnológica Nacional).
Pero si todo lo antedicho no es suficiente tenemos una acción que la muestra de cuerpo entero, mientras la Intendente Verónica Magario hablaba ante cualquier micrófono que se le ponía adelante contra el tarifazo del gobierno nacional, miles de vecinos matanceros recibían cartas de intimación para ponerse al día con el pago de los impuestos municipales bajo la amenaza de iniciarles acciones legales y hacerlo figurar en el Veraz (Veraz es un organismo privado que maneja una gran base de datos con información financiera). Muchos también fueron notificados de la sentencia de juicios por el cobro de impuestos atrasados donde les daban tiempo de ponerse al día y, en caso de no hacerlo, sus viviendas irían a remate para cubrir las deudas; lo interesante de esto es que esos vecinos que recibieron la sentencia de remate nunca fueron notificados que se les iniciaba un juicio.
También muchos jubilados recibieron notificaciones, entregada por personal municipal, de que adeudaban a un estudio jurídico honorarios por la tramitación de la excepción impositiva de la cual son beneficiarios por Ordenanza municipal. Dicho trámite es personal y muy engorroso (http://www.lamatanza.gov.ar/pages/serviciosgenerales.aspx) y en ningún momento interviene un abogado.
Cientos de vecinos, ante este tsunami de notificaciones invadieron el Banco de Cuentas municipal (Monseñor Marcón 3133 – Ex Pichincha – , San Justo) para asesorarse sobre el tema.
Es decir, por un lado, públicamente se desgarra las vestiduras reclamando por el hambre y la desprotección de los más pobres, sale por televisión, en las radios, en los diarios hablando del tema, pero por el otro lado, en el más absoluto silencio, amenaza a los vecinos y jubilados matanceros con juicios y embargos por “supuestas deudas con el estado municipal”. Por su fuera poco, este accionar deja al descubierto que el municipio vendió el paquete de deudores a un estudio jurídico para que cobre dichas deudas por los medios que ellos consideren convenientes.
Después de todo lo expuesto, ¿no es para quedarse de piedra si uno mira fijamente a la Intendente de La Matanza, Verónica Magario?.