Por Nicolás Brandolini
La historia empezó en diciembre de 2003 y todavía no hay diagnósticos clínicos de pacientes sino el silencio hueco de la cascara de la gestión Kirchnerista y la responsabilidad compartida de los Gobiernos de Alberto Descalzo, Felipe Solá, Daniel Scioli y Cristina Fernández de Kirchner. Decimos responsabilidad compartida porque hubo mucho aire caliente en las campañas de funcionarios municipales, provinciales y nacionales, mucha campaña para descalificar. Pero como dijo alguna vez alguien “La única verdad es la realidad”.
El gobierno de la ex presidenta Cristina Elizabeth Fernández de Kirchner, en repetidas ocasiones, habló de salud en sus video conferencias y hasta hubo una muy específica, en la que una voz en off decía “Soñamos con un Estado que esté con vos, desde que naces, acompañándote en cada momento importante de tu vida” https://www.youtube.com/watch?v=L_1SnN7S_8s.
El problema es que se hace, cuando no hay espacio físico donde compartir ese momento. Lógicamente en ese spot no se hablaba de los hospitales del Bicentenario porque habían sido lanzados en octubre de 2008 con plazos de finalización de obra de entre 18 y 24 meses. Quizás haya un manual para comprender la obra pública en la era del kirchnerismo, en el que se explicite a “boca abierta” el porqué de los plazos cortos para hacer obras faraónicas interminables. Tal vez, los faraones del viejo Egipto no se hayan llevado todos sus secretos a la vida en el más allá, quizás José López encontró la fórmula enterrada en algún convento del conurbano bonaerense. Nosotros no lo sabemos. 
Un año está por cumplirse desde que funcionarios en campaña anunciaron que el Hospital del Bicentenario de Ituzaingó iba a abrir sus puertas en el mes de Julio de 2015. Hoy por hoy el Hospital está cerrado y no hay chances que en lo inmediato se haga https://www.youtube.com/watch?v=Daf-i_HI0Qc.
Lo interesante de esto es que la obra estuvo suspendida hasta que el presidente Mauricio Macri la reactivó como uno de los Hospitales Generales de Agudos a cargo del PAMI junto al que se está construyendo en Escobar; provincia de Buenos Aires, y en la ciudad de Paraná. En tanto de lo que sucede en el plano local la obra fue puesta en duda a fines de 2015 ya que varias fuentes habrían sugerido que el nosocomio se habría construido con fondos malversados del PAMI.
Desde el año 2003, Descalzo utiliza esta obra en detrimento del “Hospitalito de Ituzaingó” que se ubica sobre la misma avenida que el Hospital del Bicentenario. La salita hoy devenida en el “Sala de Atención Primaria Ramón Carrillo” cuenta la historia del sistema de Salud desde cuando se desprendió de Morón en 1995. En realidad, la idea de la construcción de fue promocionada como un plan que desde un principio nunca tuvo fondos hasta la llegada de “La 125”. Una vez que la ley cayó se intentó que el PAMI, construyera los Hospitales del Bicentenario y que luego los traspasara a las provincias. Debido a que es ilegal que los fondos del organismo sean delegados, ni el Kirchnerismo se animó a aprobar semejante operación en la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires. Luego que la maniobra saliera a la luz, la justicia le tomó indagatoria a su titular, Luciano Di Césare.
LA SALUD DE LOS ABUELOS UTILIZADA EN CAMPAÑA
Es grave pero a esta altura no suele dársele su merecida importancia. El ex gobernador Daniel Scioli visitó el Hospital del Bicentenario de Ituzaingo junto a Alberto descalzo en Noviembre de 2015, dando por hecho la inauguración y puesta en marcha del hospital e incluso haciendo acusaciones muy graves acerca de lo que iba a hacer Mauricio Macri de ganar las elecciones con el sistema de salud: “Cuando Ituzaingó sea parte de los Hospitales del Bicentenario un viejo sueño de Alberto Descalzo y a partir de ahí nos pusimos a trabajar. Si ganamos nosotros la salud pública es una prioridad. El candidato de la ‘Alianza’ habla de dejar todo al libre mercado y nosotros somos la contra cara de eso”. https://www.youtube.com/watch?v=F24CpUvAW-s.
El caso es que las obras fueron suspendidas en 2015, el hospital no se terminó a seis meses del comienzo del gobierno de Cambiemos y los vecinos de ituzaingó se siguen atendiendo en el misma Sala pero de haberse hecho las obras necesarias durante los últimos 12 años nada de esto estuviera pasando.
UNA VISITA INCOMODA
Alberto Descalzo enfrenta una pulseada muy fuerte en un distrito que conoce de punta, pero dado a que combate en tantos frentes la incidencia de una y otra batalla está mostrando el desgaste de veinte años frente a la dirección del distrito. La crisis de seguridad, formar parte del último reducto de intendentes peronistas que hace años gobiernan su distrito hizo que finalmente Descalzo se viera acorralado. El caso es que esta visita incómoda fue la de nada más ni nada menos que la de la Gobernadora de la Provincia de Buenos Aires.
Vidal acostumbraba a visitar a los funcionarios del gobierno porteño sin dar aviso. Lo mismo empezó a hacer cuando asumió como autoridad máxima del gobierno de la Provincia. Aparentemente la Gobernadora fue alertada la situación precaria en la que se encuentra el Hospitalito de Ituzaingó 
debido a denuncias de vecinos y decidió hacerle una visita ella misma. Descalzo fue alertado y apareció durante la recorrida haciendo reclamos, debido a que no había sido avisado de la “bajada de la gobernadora”. El estado de precariedad de las instalaciones habría alarmado a Vidal a tal punto que le habría dado plazo de una semana a Descalzo para que le informara cual fue el destino de los fondos para terminar la construcción del nuevo hospital.