Por Prof. Joaquín G. Puebla
Panem et circenses (literalmente “pan y circo”) es una locución latina peyorativa de uso actual que describe la práctica de un gobierno que, para mantener tranquila a la población u ocultar hechos controvertidos, provee a las masas de alimento y entretenimiento de baja calidad y con criterios asistencialistas. Gramaticalmente, está formada por el acusativo singular de panis, -is (‘pan’) y el acusativo plural de circensis, -e (‘juegos del circo’).
El pan esta caro y es muy escaso para muchos matanceros.
Si bien el circo es costoso la conducción política matancera apela, nuevamente, a Panam (nombre artístico de Laura Franco, animadora infantil argentina) para festejar el Día del Niño para los “pibes de los militantes” del oficialismo (https://www.facebook.com/FerEspinozaOK/videos/422153421753659/)
El show de Panam (según dice en los pasacalles que anuncian el evento) es para todos los chicos matanceros pero, en realidad, es para los “pibes de los militantes” porque los chicos cercanos a Unidades Básicas, Agrupaciones políticas aliadas al oficialismo, etc. serán los únicos que cuenten con entradas para poder ver a la animadora y tendrán asegurado su traslado al mismo por obra y magia de la política. Hubiera estado muy bueno que la invitación al evento se realice, también, a través de las escuelas del distrito, asegurándoles entradas y traslados como ocurre con los “pibes de los militantes”. Obviamente los chicos no tienen nada que ver ni son responsables de la organicidad que le da la conducción política al evento.
Panam y su troupe no vienen gratis, según algunos funcionarios la blonda animadora tendría un cachet de 300 mil a 400 mil mangos; a eso hay que agregarle el sonido, las vallas de seguridad, los baños químicos, los micros, los jugos y gaseosas, las golosinas, juguetes y varios ítems más. También hay que sumarle el porcentaje de la “mordida” (suelen facturar dos o tres veces las prestaciones del evento); a “ojo de buen cubero” la movida “Panam” estaría saliendo muy arriba de un par de millones de mangos pero, no importa, porque el municipio tiene 11 mil millones de pesos depositados en el Banco Provincia.
Esta bueno que se haga un evento de esta magnitud pero estaría bueno, también, que la asistencia al mismo esté asegurada para todos los chicos del distrito o que se haga en González Catán o Gregorio de Laferrere. Malas lenguas aseguran que “Panam no quiere ir para los kilómetros” y remarcan que “Parece que el tema de seguridad le preocupa a su equipo y la compañía de seguros no la estaría cubriendo si se hace más allá de Camino de Cintura”.
Hay otra cuestión importante que me está dando vuelta en la cabeza y, en la cual, coincidimos con la Intendente y candidata a Vicegobernadora bonaerense, Verónica Magario. La coincidencia está en la crisis socio – económica que estamos pasando pero, así como digo una cosa, sostengo que la administración Magario “tiene sus prioridades políticas medio enrevesadas”. Las prioridades de la administración municipal no están muy acordes con la difícil situación que está pasando la población.
“Magario pidió que la alimentación sea una urgencia para Vidal porque cuatro de cada diez chicos asisten a comedores comunitarios” (http://www.el1digital.com.ar/articulo/view/85074/magario-pidio-que-la-alimentacion-sea-una-urgencia-para-vidal-porque-cuatro-de-cada-diez-chicos-asisten-a-comedores-comunitarios), expresó la Intendente matancera a los medios pero, su prioridad en el distrito, es “Panem et circenses”; esto hace abismal la grieta entre “La Magario Candidata” y “La Magario Intendente”.
EL CIRCO DE FERNANDO
Fernando Espinoza ganó ampliamente las elecciones PASO en La Matanza, nadie puede negarlo pero, si bien, había anticipado el abrumador triunfo, los números del mismo, le dejaron un “Horrible y Amargo Sabor” en la boca.
Espinoza tenía la expectativa de sacarle un buena diferencia a Cristina y, por sobre todo, al tándem provincial del “Frente de Todos”, Kicillof – Magario pero, sus expectativas no se cumplieron y no pudo demostrar que los votos matanceros eran de su propiedad dado que Fernández – Kirchner y Kicillof – Magario sacaron muchos más votos que él, ni siquiera en la mesa que votó pudo superar a los candidatos nacionales y provinciales de su espacio.
¿Por qué Fernando Espinoza aspiraba a sacar más votos que Cristina y que Magario?, la respuesta es simple pero, a la vez, muy compleja. Fernando Espinoza siente que le han cerrado las puertas de ingreso al círculo de confianza de la ex Presidenta y, sospecha que, en eso, tuvo mucho que ver la Intendente matancera Verónica Magario quién, paulatinamente, se ha ido alejando la influencia política de Espinoza. Si bien comparten actos y tribuna su relación (según fuentes cercanas a la “Pareja Gobernante”) es bastante fría.
Espinoza nota, también, una gélida recepción entre los “Consejeros Áulicos” (Consejero áulico, – del latín aula, en alemán hofrat – era el título con el que habitualmente se designaba a un consejero político de alguna de las cortes de los principados electorales del Sacro Imperio Romano-Germánico. El carácter del título varió con el tiempo, y pudo ser desde un reconocimiento honorífico hasta un cargo político o judicial de importancia) del Instituto “Patria”, sede y trinchera del kirchnerismo más duro. Hasta octubre tendrá entrada libre y gratuita al mismo pero le andan mezquinando todo dialogo con Cristina Fernández de Kirchner.
Espinoza anduvo de campaña por todos lados menos por La Matanza, sus esporádicas apariciones fueron muy acotadas y cuidadas; si bien recorrió varias localidades del distrito, esas recorridas fueron muy coreografiadas por su equipo de campaña (Alejandra Rafuls dueña de la agencia AR & ASOC. S. A. – https://semanarioquintopoder.com/?p=22149 -) quién no dejó de fotografiar, filmar o grabar cada uno de sus pasos y/o acting de campaña.
En esta segunda etapa de la elección promete estar más cercano con el vecino pero no creo que sea así porque Don Fernando tiene aspiraciones políticas importantes: quiere ser ministro nacional o provincial o, en su defecto, quiere “Gobernar a la futura Vicegobernadora Verónica Magario”. Esas aspiraciones lo llevaran a recorrer cuanto acto haya y subirse en todo palco que pueda.
Si bien una ley no le estaría ayudando a ser ministro, ese inconveniente podría subsanarse rápidamente desde el poder pero, primero hay que acceder al poder y, segundo, el poder debe tener la voluntad de subsanar dicho obstáculo.
Estás cuestiones obsesionan al líder matancero, le quitan el sueño pero hace las delicias de sus detractores quienes, mimetizados en su entorno más cercano, sostienen que “Fernando está cobrando lo que pagó” y agregan, con una sonrisa socarrona, que “Fernando se olvidó de los compañeros, de los militantes, de los amigos, de los vecinos… Es una estrella de rock, nadie puede hablar con él, anda encerrado en la jaula de oro que él mismo diseñó y construyó. Creo que lo van a dejar clavado en la Intendencia matancera, que no es poca cosa, pero no es su deseo porque él quiere más, se siente para más pero no lo dejan crecer”.
Uno de los candidatos que lo acompañan en la lista para octubre comentó que “Espinoza se encerró en sí mismo, piensa y cavila sobre un futuro político de alcance nacional o provincial. Se sabe capaz pero sus actitudes y varios comentarios pocos afortunados lo habrían alejado de los afecto de Cristina” y aseguran que “Alberto Fernández lo banca hasta octubre, después dependerá de Cristina para ver si se queda en el distrito o se va a otro cargo”.
“Todos los candidatos locales del oficialismo asumen este escenario y esta situación está generando mucha intranquilidad porque La Magario dejó parada la administración municipal y hay que darle bola a la gestión para que esta comience, después de muchos años, a funcionar correctamente” señaló un alto funcionario municipal.
Un reconocido político oficialista del distrito afirmó que “Fernando se olvidó de los compañeros y eso se notó, aunque poco, en las elecciones PASO. En varias meses se notó que hubo corte de boleta; votaron por Cristina pero cortaron la parte de Fernando” y sostuvo que “Es exclusivamente culpa y responsabilidad de Espinoza, no hay una campaña contra él sino que él mismo se ganó el encono y la bronca de muchos compañeros”.