Por Mariano Genisso
Descalzo desparramó fichas en todo el tablero político del distrito para no perder poder, más allá de ser o no candidato a intendente en las próximas elecciones. El intendente hace abuso de su cintura política y cosecha de lo sembrado en estos casi 20 años como jefe comunal.
Ante rumores de una posible no presentación de Alberto Descalzo para un nuevo mandato (sería el sexto) como Intendente de Ituzaingó, cada vez es mas fuerte la interna entre sus funcionarios, varios de ellos jugarán en las próximas PASO.
Pablo Piana, el secretario de Infraestructura, Planificación y Desarrollo, jugará fuerte con el antecedente de haber encabezado la lista del intendente en las últimas legislativas. Aunque aquel fracaso electoral muy probablemente haya sido la razón de que hoy tenga innumerables competidores.
El hijo de intendente, Pablo Descalzo, sin contar con el guiño de su padre para el traspaso generacional como ocurrió en otras intendencias, tendrá que jugar como uno más en la interna oficialista. No obstante, el secretario de Desarrollo Humano, con el apoyo de La Cámpora bien puede convertirse en el elegido de Nación y despegarlo de su padre bastante mas emparentado al Sciolismo.
No hay que descartar de la interna a Marcelo Nadal, uno de los hombres mas fuertes del municipio. El presidente del HCD piensa que es su momento para jugar por la intendencia, que ya hizo los méritos suficientes en su extenso recorrido político. Sin embargo por ahora no instala su imagen como candidato.
En la larga lista de precandidatos del oficialismo, aparece la contadora Sandra Rey, a quien por lo bajo muchos ningunean pero que se maneja inteligentemente para instalarse en este revuelto escenario como una candidata firme.
Jorge Piccoli, secretario de Promoción Social y Políticas Culturales, es otro que desde un principio se anotó para jugar por el sillón del intendente jugando con el Sciolismo por su estrecho vínculo con Cristina Álvarez Rodríguez.
No hay que descartar de la interna oficialista a Alfredo Almeida, el secretario de gobierno, ni a Marta Pérez, que apareció en alguna encuesta en redes sociales, como para que todo siga quedando en familia en el municipio de Ituzaingó.
Todos los precandidatos aclaran que solo jugaran por la intendencia si Descalzo se baja. En el caso que el intendente vaya por su sexto mandato todos se encolumnaran tras él y allí comenzará otra disputa por una mejor tajada.
Tampoco nadie niega que existió un coqueteo de Descalzo con el Massismo, aunque hoy es francamente improbable pensar en el cruce de vereda, el Vasco Othacehé (intendente de Merlo) en reciente cumbre con otros intendentes de la primera sección confirmó que no le apoyará a ningún candidato del Frente Renovador en Ituzaingó, quizás entendiendo que en política cuatro meses son eternos y todavía todo puede pasar.
Hasta en la oposición, supuestamente mas fuerte, hay ex aliados de Alberto (como lo llaman, reconociendo el estrecho vinculo) que no disimulan a la hora de reconocerlo políticamente y criticar laxamente su gestión, sin demostrar el destete de su mentor.
De hecho, otro sector de la oposición, con menos chances electorales, apunta a que todo es más de lo mismo y que Descalzo puso a hombres de confianza a jugar fuertemente en la oposición para debilitar a la misma.
Centrándonos en el Frente Renovador, Roberto Rocha, ex secretario privado de Descalzo encabezó el triunfo en la pasada elección legislativa por parte del Massismo en Ituzaingó. Más allá de esa condición, Carlos Acuña surge como el candidato más fuerte por este espacio con importante apoyo sindical y mucho trabajo en el distrito con la juventud. Con Aníbal Rucci como aliado, otro que se movió fuerte con afiches desde principio de año, Acuña no solo tendría que contar como rival en las PASO con Rocha si no también con el presidente de Bloque del FR, Julio Díaz, que también puso afiches desde hace algunas semanas pero nadie descarta que pueda unirse a cualquiera de los dos. En esta disputa aparece la muy ninguneada Marisa Benz, vecinalista y ex secretaria de Rocha, a la que nadie tiene en cuenta en la interna pero que por ahora no se baja.
En el PRO de Ituzaingó, Osvaldo Marasco es el máximo referente y todos conocen sus estrechos vínculos con el intendente que no terminó en su paso como funcionario hace bastante tiempo. Marasco irá a internas con Pozzuto, un hombre algo más combativo en el discurso pero con menos experiencia y respaldo económico.
Por otro lado, el habitual candidato opositor, Walter Elías se presentará por el partido vecinalista Sí (Siempre Ituzaingó), pero es pieza clave en el armado de Parte, el partido de Alberto Fernández, y tiene fichas importantes para jugar con Scioli o con Massa. UNEN todavía no definió candidato por el revuelto escenario que tienen a nivel nacional, pero sería Esteban Vallarino. Mientras tanto, Ángel Torres será candidato por el Frente Popular. Nuevo Encuentro, con mucho trabajó en el AFSCA de su hombre fuerte en el distrito, Daniel Larrache. Todavía no se sabe si presentará lista colectora, tal como lo hizo en las últimas elecciones.
El oficialismo con Descalzo piensa que gana sin mayores inconvenientes, mucho más con el descenso de Massa en las encuestas y su interna feroz en el distrito. La cuestión será complicada si el intendente no compite, por decisión propia o por que lo bajen de Olivos, como ya surge como fuerte rumor por la zona oeste.