Por Mariano Genisso
El partido socialista de Morón no puso más que en blanco sobre negro, en una situación que se caía de madura. Ante reiteradas sesiones del HCD en que las votaciones del bloque socialista fueron divididas entre los ediles Favio Martínez y Adriana Kreiman, se anunció la decisión de romper el bloque.
De larga data vienen las desavenencias en el bloque socialista de Morón. Dicen quienes conocen la interna que se pueden decir muchas cosas, pero la verdadera razón de la ruptura son las ambiciones políticas de ambos concejales. Tanto Kreiman, como Martínez quieren encabezar en las próximas elecciones, de hecho fueron a una PASO en los últimos sufragios.
Favio Martínez destaca que en las últimas elecciones fue la opción puramente socialista y en ese sentido, opositor al Sabbatellismo, luego votó en el HCD, mientras que Kreiman acompaño con su mano en alto varias veces al oficialismo, inclusive en la sesión por la ampliación de La Cantábrica se ausento para no chocar fuertemente con su compañero de banca que tuvo una postura combativa con respecto a la rezonificación de los terrenos ferroviarios de Haedo y por supuesto voto en contra.
En un comunicado oficial, el concejal Favio Martínez confirmó días pasados la ruptura del bloque: “Durante el 2014 fueron agotadas todas las instancias para acercar posiciones y puntos de vistas sobre qué lugar ocupa el PS en la vida política del distrito. En las últimas elecciones, luego de participar en las PASO en listas diferentes (siendo la que yo encabezaba la única lista pura socialista), integré la lista del FAP donde nos eligieron como una clara opción opositora al gobierno local y eso debe quedar materializado en las votaciones de los expedientes, en particular aquellos que contienen una mirada política de qué municipio pretendemos”, sentenció el concejal en el comunicado que anunció la separación del bloque socialista.
Por su parte, aguardamos la respuesta de la concejal Adriana Kreiman que declaró hace dos meses para Quinto Poder su deseo electoral de ser la candidata del consenso y allí anticipó las diferencias en las votaciones en el propio Frente Progresista de Morón y en su propio bloque. Por ejemplo, Kreiman aprobó el presupuesto 2015 yendo contra la corriente del frente y ya tenía postura clara para aprobar la ampliación de La Cantábrica más allá que luego se ausento. A la concejala se le endilga desde su espacio su voto permanentemente oficialista pese a tener un discurso enfrentado al Sabbatellismo.