Al Gobernador de la Provincia de Buenos Aires y candidato a presidente por el FpV se lo esperaba en Morón pero nunca apareció. Nuevo Encuentro cuenta con apoyo Kirchnerista, pero el Sciolismo, por ahora, no lo apoya expresamente.
El último viernes se esperaba un “borrón y cuenta nueva” en la relación de Nuevo Encuentro con el Sciolismo, ya que se aguardaba la presencia del Gobernador Daniel Scioli en el acto por la ampliación la Escuela Secundaria 20 de Morón, pero el candidato a presidente del FpV jamás llegó a Morón.
En el acto ultra Kirchnerista, dieron el presente Aníbal Fernández, Carlos Zannini, Wado de Pedro y el ministro de educación Alberto Sileoni, pero aun así la ausencia de Daniel Scioli se sintió, ya que fue anunciada su presencia y Morón se empapeló horas antes con su cara y la de Hernán Sabbatella.
Pero en dicho acto, no solo faltó el Gobernador (que confirmó su “faltazo” media hora antes del comienzo), tampoco estuvo ninguno de sus hombres, lo que alimenta la teoría que Scioli por ahora no se mostrara con los Sabbatella, la última vez fue antes de las PASO en el Parque Industrial “La Cantábrica”. Tampoco en el acto del último viernes se presentaron, Pablo Navarro, ni Hernán Solito, quienes compitieron en la interna con Hernán Sabbatella, y siquiera brindaron su apoyo para el ganador de la interna una vez terminada la misma.
Pero al Gobernador quizás le sobran motivos, o al menos tiene algunos para no darle su apoyo a NE. A decir verdad, Scioli fue siempre discriminado por el Sabbatellismo que se jugó, quizás apresuradamente como otros sectores del Kirchnerismo, por la ya olvidada pre-candidatura a presidente de la nación de Florencio Randazzo. De hecho, la senadora Monica Macha, esposa de Martín Sabbatella, expresó en abril de este año las diferencias de su partido con respecto a Daniel Scioli y llegó a decir que NE no lo llevaría al Gobernador en las boletas de cara a las PASO de agosto.
Pero para el Sabbatellismo no quedó otra que llevarlo en la boleta de las PASO, ya que no hubo interna presidencial en el FpV. Fue por eso, que después de las elecciones primarias, donde Daniel Scioli tuvo como candidato en Morón a un hombre de su riñon, el Secretario de Niñez de la provincia: Pablo Navarro, se esperaba su presencia post elección para fortalecer la imagen de la lista ganadora de la interna moronense, la comanda por Hernán Sabbatella. Ya que en Morón los votos del FpV no logrados por NE en primera vuelta serán vitales para competir con los 31 puntos de Ramiro Tagliaferro del PRO, porque con todos los sufragios del conjunto del FpV en las primarias lograría retener el poder en Morón, pero solo de esa manera.
Recordemos que la interna Kirchnerista en el municipio de Morón tuvo tres listas: la oficialista encabezada por Hernán Sabbatella, la Sciolista con Pablo Navarro como candidato a intendente y la lista de Hernán Solito, el apoderado del PJ en Morón con fuerte apoyo de La Cámpora. La elección en agosto arrojó un triunfo en la interna del oficialismo con el 60% de los votos, el 22% para Navarro y 18% para Solito.
Ese 40% del voto de la interna que no fue para NE y se dividió entre Navarro y Solito es el que necesita imperiosamente el Sabbatellismo para no perder el poder en Morón en las generales, ya que fueron 18 mil votos (11 puntos de diferencia) los que le sacó, en el cálculo mano a mano, Ramiro Tagliaferro (Cambiemos-PRO) a Hernán Sabbatella.
Dado este marco sensible para que el Kirchnerismo siga gobernando en el municipio de Morón, la presencia de Scioli era más que imperiosa para no abrir más la herida en la relación NE-FpV, que ya tienen sus lesiones en el propio gobierno moronense. Lesiones a las que el propio vicepresidente del HCD local, Gerardo Calabria calificó con ironía como “un esguince, todavía no una fractura”, refiriéndose en nota exclusiva de Quinto Poder a la relación FpV-NE en el propio seno del HCD.
El Tano Calabria, “el Scioli del Concejo deliberante de Morón” como se autodenomina, acusó recibo al no ser invitado a la fallida visita del Gobernador a suelo moronense y también señaló, en la nota realizada por este medio la semana anterior, que “el Sabbatellismo puede ganar, pero solo si se junta con el resto de las agrupaciones”, o para pasarlo en limpio: si repone relaciones con el Sciolismo local, que hoy parece estar bastante lejos del Sabbatellismo.