Por Prof. Joaquín G. Puebla
Dos Caras es un personaje ficticio de DC Comics y un villano enemigo de Batman. Fue creado por Bill Finger y Bob Kane, su primera aparición fue en Detective Comics N° 66 (1942). Anteriormente fue Harvey Dent, fiscal de distrito de Gotham City y un aliado de Batman. Pero se volvió un sociopata y se convirtió en el criminal Dos Caras cuando la mitad izquierda de su cara queda en siniestro al ser rociada con ácido durante un juicio; desde entonces decide entre el bien o el mal mediante el lanzamiento de una moneda. Originalmente, Dos Caras era un simple villano de cómic cuya característica era cometer crímenes basados en el número dos, como robar el Segundo Banco Nacional de Gotham City a las 2:00 del 2 de febrero. En los últimos años, autores como Frank Miller o Andrew Helfer le han descrito como una persona con un desorden de personalidad múltiple y profundos traumas infantiles, y que su desfiguración física sólo disparó su psicopatía.
Ha sido popularizado en la serie animada televisiva de los años 90 e interpretado por Billy Dee Williams sólo como Harvey Dent en el filme de 1989 Batman, para luego salir en Batman Forever interpretado por Tommy Lee Jones en la película de 1995. También salió en la película The Dark Knight como Harvey Dent y más tarde en Dos Caras. En este film lo interpretó el actor Aaron Eckhart.
Información Nº 384
Conmemoración del Día Internacional de la lucha contra la Violencia de Género
Mañana viernes 24 de noviembre se realizará una jornada abierta a todo público en conmemoración al Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra La Mujer. La misma será en la Plaza General San Martin de San Justo, entre las 12:00 y las 22:00 Hs.
Una nueva jornada, organizada por la Mesa Local de Prevención y Erradicación de Violencia de Género, se llevará a cabo el viernes 24 de noviembre en Plaza General San Martin, abarcando los horarios entre las 12 y las 22 horas.
El objetivo de la misma es visibilizar y sensibilizar sobre la problemática en el territorio, desarrollando diferentes actividades relacionadas con la temática. El evento estará dirigido a la comunidad, acompañando la lucha en territorio con el lema y la misma fuerza de #NiUnaMenos y al grito de “BASTA DE FEMICIDIOS”.
Nos habitual ni agradable que hagamos una caricatura de la Intendente matancera, Verónica Magario, como la que ilustra esta nota pero, lo hicimos con el objetivo de señalar la política del municipio, que conduce Magario, respecto a la violencia de género.
Magario desde su asunción como Intendente no le dio mucha relevancia al tema y recién comenzó a impulsar acciones (solamente actos, jornadas y alguna otra actividad menor) cuando el número de femicidios creció exponencialmente pero esas acciones son solamente simbólicas dado que no emprendió ninguna política seria respecto a la prevención y/o concientización de la violencia de género.
Este doble juego de decir una cosa y hacer otras (en este caso no hacer nada) es muy habitual en la política en general pero, en particular, en La Matanza es toda una escuela y Verónica Magario es una consumada maestra a la hora de accionar de esta manera. No le reclamó a la Intendente que haga un titánico esfuerzo que abarque todo el distrito porque sería una tarea imposible pero estaría bueno que realice algunas acciones dentro de la estructura municipal en la que si puede accionar directamente y sin restricciones.
Es doloroso y lamentable que en el ámbito de la Municipalidad de La Matanza se siga hostigando sexualmente a sus trabajadoras, a vecinas que se acercan a solicitar una ayuda, a trabajadoras precarizadas a las cuales amenazan con el despido directo si no acceden a los deseos de los políticos de turno.
Esto no es un invento ni nada parecido es una realidad cotidiana que muchas trabajadoras municipales matanceras pueden describir con pelos y señales. Todo se sabe, todo trasciende, todo conforma una realidad imposible de ocultar.
Hay situaciones y hechos que tienen una cotidianeidad que asombra y que ocurre, aunque ustedes no puedan creerlo, en la puerta misma del despacho privado de la Intendente. Muchas de están cuestiones las hemos develado en diferentes notas de nuestro medio y la política no le ha prestado atención ni han avanzado en la resolución de la problemática.
VIOLENCIA DE GÉNERO
Hay varios casos de violencia de género que sucedieron, siguen sucediendo y, lamentablemente, seguirán sucediendo en el ámbito de la Municipalidad de La Matanza.
Muchas trabajadoras municipales del distrito han sufrido, en mayor o menor medida, violencia de género por parte de los dirigentes políticos del distrito y muchos de ellos siguen cumpliendo funciones normalmente más allá de haber sido denunciados ante el departamento de Asesoría Letrada de la municipalidad para que se inicie un sumario, pero dichas denuncias han sido retiradas discretamente o, directamente, desapareció el expediente.
Nuestro medio publicó varias de esas denuncias y ninguna fue negada por el departamento ejecutivo municipal pero, lamentablemente, tampoco se investigaron y los violentos siguen campeando a sus anchas por las oficinas municipales.
A principio de noviembre entrevistamos a una trabajadora municipal que al borde de la jubilación debió retirarse de la oficina que cumplía funciones por haber sido testigo presencial de una agresión física hacia la persona de la secretaria del área.
En la nota (https://semanarioquintopoder.com/?p=19334), Susana Samaniego nos contaba cómo fue la agresión que sufrió la Secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable Karina Rocca a manos de su pareja y también trabajador municipal, Hugo “Poronga” Galván.
Samaniego realizó una denuncia penal y la misma también fue presentada en Asesoría Letrada del municipio. Ambas denuncias desaparecieron misteriosamente y la situación de violencia sigue en una oficina municipal.
La Intendente municipal, Verónica Magario, está al tanto de la situación porque la misma ocurre desde hace bastante tiempo y nunca movió un dedo al respecto. Es preferible y, menos complicado, hacerse la distraída que accionar como es debido. No pedimos que echen a nadie ni que se haga política con el tema pero hay acciones y decisiones que se podrían tomar para intentar que estas situaciones bochornosas no se sigan repitiendo.
La foto de “Ni Una Menos” donde están Fernando Espinoza, Verónica Magario y, justo entre los dos, Karina Roca es una muestra palpable de cómo se trabaja en el municipio matancero estos temas.
ACOSO LABORAL
Acoso Laboral: Trato hostil o vejatorio al que es sometida una persona en el ámbito laboral de forma sistemática, que le provoca problemas psicológicos y profesionales.
Nuestro medio publicó varias situaciones que se podrían considerar acoso laboral. Una de las notas que causó, en su momento, una gran controversia fue el despido de Romina Coman por parte de Silvia Solís, quién le posibilitó el ingreso, en su momento, al municipio y ordenó, en ese momento, que no le renueven el contrato porque “La compañera no venía a los actos” pero no iba a dichos actos por encontrarse en horario laboral y como no trabaja con papeles sino con bebes y niños menores de 3 años, siempre privilegio la atención de los chicos a la asistencia de un acto (https://semanarioquintopoder.com/?p=3225).
La situación que vivió Coman es muy común en el municipio matancero porque, a pesar de estar vigentes la nueva Ley 14656 (http://www.gob.gba.gov.ar/legislacion/legislacion/l-14656.html) que regula un nuevo marco laboral para los trabajadores municipales de la provincia de Buenos Aires, la Intendente local, Verónica Magario, no adhirió formalmente a la misma y esto implica que la precariedad laboral de los trabajadores municipales del distrito siga en vigencia según lo establecía y permitía la Ley 11757.
Mes a mes hay bajas y altas en el personal municipal y las mismas son tan arbitrarias que algunas entran el rubro de “Es real aunque usted no lo crea”. No le renuevan el contrato a trabajadores municipales que están poniéndole el hombro al municipio desde hace más de 10 o 15 años y toman profesionales extranjeros para reemplazar a esos municipales que conocen el paño y “no auspician con su trabajo la recaudación de la municipalidad paralela”. Situaciones hay muchas y en todas las áreas del municipio pero nadie habla ni da la cara para no ser el próximo en ser echado del trabajo. Esta situación es tan cotidiana que el puntero o dirigente político tiene la potestad de dejar sin trabajo a un “militante de su cuadra” solamente con hacer un llamado telefónico a la secretaria privada de la Intendente y el despido sale y, lo peor de todo, no hay una explicación razonable para el mismo. La explicación que dan es: lo pidió tal persona.
Más cercano en el tiempo es la situación que se ha generado en el Honorable Concejo Deliberante de La Matanza donde la Concejal Mónica Noguer dispuso la baja Patricia Alejandra Balbi (Legajo N° 40716) quien trabaja, desde el 01/01/2008, en la oficina de la edil. Su despido no fue porque realizaba mal su trabajo ni porque se robara los elementos de librería ni porque “facturaba negocios paralelos” ni nada por el estilo; Noguer la echó simplemente porque “la tenía podrida con su enfermedad” (https://semanarioquintopoder.com/?p=19192).
En 2014 a Balbi le dieron licencia psiquiátrica (no fue una decisión de ella sino del médico laboralista) y estuvo en uso de esa licencia durante 6 meses; el diagnóstico: estrés laboral. Al reintegrarse al trabajo después de la licencia comenzó a sentir “maltrato psicológico” por los constantes comentarios discriminatorios por parte de la edil oficialista, tales como: “Estás loca” o “Te haces la Pel…..” o “tratándola directamente de inútil”, etc.
Estos comentarios constantes generaron un clima laboral muy negativo y se evidenciaba con un trato despectivo y amenazando constantemente Noguer con despedirla. Varios Concejales (tanto oficialistas como opositores) que comparten alguna Comisión de trabajo con Noguer fueron testigos de estos malos tratos y de las actitudes discriminatoria de la Concejal.
En abril de este año, Patricia Alejandra Balbi (Legajo N° 40716) tuvo una recaída y está siendo atendida por la Dra. Yolanda Zarate (Psiquiatra – MN 153927) en la Clínica “El Sol” con el diagnóstico: Depresión y esquizofrenia.
A raíz de esto la Concejal Mónica Noguer se comunicó con Balbi, en forma telefónica, y le dijo (textual) que: “Me tenes podrida porque siempre estás enferma, no servís para una mierda y que, por tal motivo, te doy de baja en el trabajo”.
Ante esta situación los delegados gremiales del STMLM en el Concejo Deliberante iniciaron una protesta con carteles y volantes donde exponían la situación y señalaban a Noguer como la responsable directa del despido de Balbi.
Los delegados sindicales no aflojaron y, más allá de haber sido nuevamente votados por sus compañeros para seguir siendo delegados, Noguer les tomó ojeriza y nos los recibe ni les habla. La Concejal Mónica Noguer al no poder torcerle el brazo a los delegados sindicales apeló a varias estrategia para lograr sumisión (https://semanarioquintopoder.com/?p=19382). Primero ninguneo a los delegados sindicales, después los mandó a apretar quitándoles horas extras; como esto no funcionó le presentó una lista en contra en las recientes elecciones de los delegados sindicales.
Como ganaron nuevamente mandó a un militante de ella a arrancar los carteles y, durante la semana pasado, intentó enfrentar a los trabajadores municipales entre ellos por le ordenó al personal de seguridad que ellos arrancaran los carteles que tanto molestan a la Concejal.
Al no lograr enfrentar y dividir a los trabajadores municipales dispuso, el viernes pasado, el cambio de funciones y de lugar de trabajo de los delegados municipales.
Una actitud bien de peronista (no sé si me entienden).
ACOSO SEXUAL
Hace unos días publicamos la denuncia contra el Concejal Marcelo Haljan respecto al acoso sexual e intento de abuso físico contra una vecina que se había acercado a su despacho para solicitar ayuda para su carrera deportiva. También estamos estudiando el caso de una menor de edad (17 años) que pasó por lo mismo. Estos dos casos ocurrieron en dependencias municipales y la Intendente Verónica Magario volvió a hacerse la distraída.
Esto de mirar para otro lado le dio pie a edil oficialista, Marcelo Haljan, para que en la reunión de bloque previa a la última sesión del HCD pidiera la palabra e intentará conseguir “el apoyo del bloque para plantear en el recinto su defensa ante los ataques periodísticos de los cuales es víctima él y su familia”.
Obviamente los concejales se hicieron los distraídos y le pidieron que esperase a que se expida la justicia pero en realidad ninguno quería apoyar a su compañero de bancada porque la mayoría desconfía de su inocencia.
“Yo no pondría las manos en el fuego por este pibe y mira que lo conozco de chico” aseguraba un Concejal oficialista y remataba diciendo “Es muy capaz de haberlo hecho, a nosotros nos llegaron muchos comentarios de algunas barbaridades hechas por este muchacho”.
Otro Concejal del mismo bloque afirmó que “Le creo más a la chica que hizo la denuncia que a Haljan. Es un tipo raro y nadie en el bloque lo banca” y sostenía que “Verónica debería intervenir y llamarlo al orden o a silencio, no nos puede seguir exponiendo a la vergüenza de seguir teniéndolo en nuestro bloque”.
Obviamente muchos se quedaron estupefactos cuando leyeron la declaración de “GRM” (aún no damos el nombre completo porque se está tramitando la denuncia penal) cuando contó que “Unos días después voy a verlo nuevamente, porque había quedado en ir a su oficina durante la semana para ayudar y comenzar a militar, y me hace pasar a su oficina donde estaba con Víctor Salgado quién, en medio de muchas indirectas, me dice ‘hay que saber en qué poronga sentarse’ para progresar políticamente, sino pregúntale a Verónica (en referencia a la Intendente municipal Verónica Magario)” (https://semanarioquintopoder.com/?p=19485).
SIN REACCIÓN EN UN CONTEXTO INEXPLICABLE
Nada de lo escrito en párrafos anteriores es mentira, todo está documentado y la mayoría de los municipales saben que es cierto y esto duele porque se esperaba que Verónica Magario, desde la Intendencia municipal, terminara con estos abusos hacia el personal municipal y, principalmente, hacia las mujeres.
No se puede explicar el silencio de Magario porque no manifestó, ni siquiera, una solidaridad de género antes las innumerables denuncias que se han presentado en estos últimos años en Asesoría Letrada, denuncias que desaparecieron misteriosamente o que están tan bien archivadas que nadie las encuentra para que avance el expediente.
Es lamentable las acciones que no se toman y que cuestan vidas, arruinan vidas y perjudican la salud de los/las trabajadores/ras municipales matanceros.
Verónica Magario no ha demostrado ni solidaridad de género, ni ha impulsado políticas serias de género solo montó escenarios que terminan siendo cascaras vacías con el único fin de verse bien en los medios.
Es tiempo de reflexión y de impulsar algunas cuestiones para resolver, de fondo, situaciones que no pueden darse en el siglo XXI.