El pasado viernes a las 13 horas, en el Huracán de San Justo estaba convocada la Asamblea Extraordinaria en la cual se elegirían los integrantes de la junta electoral que interviene en la confección de los padrones, pone la fecha de elección y el control general de la próxima elección para renovar autoridades del STMLM.
Alrededor de treinta minutos antes del inicio de la asamblea, en la puerta misma del Club Huracán de San Justo se desató un enfrentamiento entre los sectores que responden al oficialismo y los compañero de Jorge “Catola” Rego; en dicho enfrentamiento resultaron lesionados dos trabajadores municipales con cortes y golpes en la cabeza.
Los vidrios del club fueron rotos y los pedazos de vidrios fueron utilizados como proyectiles.
Uno de los protagonistas de los incidentes Jorge “Catola” Rego, afirmó que “Nosotros fuimos a la asamblea a marcar nuestra presencia y hacer oír nuestra voz y presentar nuestros candidatos a la junta electoral. Pedimos que se vaciara el club y se verifique que todos los que estaban dentro de las instalaciones sean municipales en condiciones de votar. Cuando quise registrarme para ingresar, algunos empleados de Sluga quisieron impedírmelo y uno, en forma cobarde y artera, me arrebató y me pegó a traición. Ante esto reaccioné y se generalizó la pelea. Ellos rompieron los vidrios y nos comenzaron a usar los pedazos de vidrios como proyectiles y uno tiro al piso una bomba de estruendo, ante esto nos retiramos de la asamblea”.
Rego sostienen que “Este fue un ataque artero y organizado por Juan Carlos Sluga, él es el responsable directo de todo lo sucedido, nosotros fuimos, días antes y es de público conocimiento, a solicitar que nos dieran un lugar en la junta para que la asamblea se desarrollé normalmente, para poder ejercer nuestro derecho a controlar todo lo referido a la elección. No quisieron ser amplios y democráticos y los resultados están a la vista”.
“Algunos andan diciendo que fui con la hinchada de Chicago, hace 20 años que no voy a ver a Chicago. Muchos compañeros están confundidos, nosotros no fuimos con barras bravas, los barras bravas estaban dentro del club y fueron pagados por Sluga” asegura Jorge Rego y agrega que “Acá hay un pacto espurio entre el ejecutivo municipal y esta dirigencia entreguista. El ejecutivo no quiere problemas, quieren un sindicato entregado y que no discuta ni pida nada, que se conforme con las migajas que le dan a los municipales. La pregunta de fondo es: ¿qué clase de sindicato quieren?, ¿uno que sea entregador de los compañeros, que no defienda nada, que acepte todo sin preguntar nada, que solo se preocupe por el negocio de la financiera, o un sindicato con fuerza e independencia para sentarse a discutir los derechos de los municipales y que defienda la dignidad de los trabajadores?”.
El inicio de los incidentes
Jorge Rego explica que “Todo comenzó en los lugares de trabajo, en muchas dependencia municipales dejaban salir a los compañeros identificados con el oficialismo y los subían a los micros pagados por el STMLM, a nuestros compañeros no los dejaban salir y aún menos subir a los micros del sindicato. Esto sucedió en varios lugares como en el Corralón 3, Hospital Equiza de Catan, el Hospital de Niños, la subdelegación de Virrey del Pino y otros más” y agrega que “Nosotros sabíamos que perdíamos la asamblea y fuimos solos y entramos solos para acreditarnos como corresponde. Cuando ingrese pedí que se vaciara el club y poder certificar el ingreso de los compañeros y ver que todos eran municipales, porque en el club ya había mucha gente adentro y no veíamos muchos municipales. Cuando sacamos los recibos para acreditarnos no nos quisieron atender y viene uno y le sacan el carnet del sindicato a uno de los municipales que venían conmigo y se lo tiran al piso. Comenzamos a discutir y uno, de arrebato y a traición me mete una trompada y en ese momento se generaliza la pelea. La misma fue una pelea a trompadas, nosotros no llevamos ni piedras ni palos, desde adentro comenzaron a romper mesas y con las patas de las mismas nos pegaban a nosotros y es ahí cuando empiezan a tirar de todo es que se rompen los vidrios. Varios de los que estaban adentro comienzan a tirar los pedazos de vidrios a modo de piedras”.
“Nosotros fuimos a marcar nuestra posición, lo único que queríamos es poder hablar en la asamblea, como es nuestro derecho, pero la patota de Sluga no nos dejó entrar, si hasta había una mujer que comenzar a rociar a todos nosotros con gas pimienta en los ojos” sostiene Rego y añade que “Esta fue realmente vergonzoso y nos llena de indignación, Sluga se organizó todo, la agresión fue a traición, como fue siempre su estilo”
Jorge “Catola” Rego asegura que “Nos avisaron que se había montado un operativo policial especial para evitar que nosotros lleguemos a la asamblea, no pudieron impedirlo. Había una orden del Intendente que nos controlen a nosotros y se podía no llegásemos a la asamblea y de que le dejen la zona liberada a Sluga y su patota” y sostiene que “Varias veces fui testigo como Sluga cambiaba las cosas para culpar a los demás de los desastres que él organizaba, Cuando se votó la ley 11757, fui a La Plata y terminamos enfrentados con la policía, en medio de la pelea, estando cachito Suarez a mi lado, vemos como uno de los esbirros de Sluga (Carlos Petucci) arroja una piedra y le pega en la cabeza a una compañera nuestra; lo queríamos matar pero vino Sluga y dijo que había que decir que fue la policía. Esta son las cosas que hace Sluga”.
“Nunca defendió a los municipales”
Jorge Rego asegura que “El gordo Sluga nunca defendió a los municipales, siempre estuvo pendiente solamente de su carrera política, entregó todo y negoció todo teniendo solo en mente eso” y explica que “Cachito Suarez y yo fuimos Concejales por nuestra militancia junto a Alberto Balestrini no por ser municipales, a Sluga no le debemos nada, porque siempre priorizó su carrera política por encima de los reclamos de los municipales. Fue 8 años diputado y no hizo nada ni por los municipales ni por nadie; que va hacer si ni siquiera habló ni una vez en las sesiones. Cuando fui Concejal acompañe la Ordenanza que pasaba a planta permanente a todos los compañeros municipales que habían ingresado antes del 2002, ahí blanqueamos a todos, no como ahora que los pases a planta son digitados”.
“Sluga utilizó siempre al sindicato para sus intereses políticos y económicos, que explique cómo funciona la financiera, que diga de una buena vez quién o quiénes son los dueños que le roban el sueldo a los municipales” señala Rego y sostiene que “A Sluga y esta conducción le echaron 600 compañeros municipales y no hicieron nada, Sluga aprobó con su silencio y su inacción la nefasta ley 11757; Sluga y esta conducción fundieron la Obra Social, con hoteles a dos mangos por día no se compran remedios ni se para la olla en las casas. La dignidad de los trabajadores municipales se defiende luchando por un sueldo digno y no haciendo negocios espurios con los magros salarios de los municipales”.
Una asamblea viciada de nulidad
“Vamos a pedir la nulidad de todo lo actuado en la asamblea, porque la misma desde su convocatoria, no cumplió con el Art. 65 del estatuto: no se respetó el horario de ingreso, había adentro de la asamblea gente que no era municipal (eran cooperativistas, vaya uno a saber quién los trajo y a pedido de quién), no se difundió la asamblea en los lugares de trabajo, no se convocó a los delegados para informarles de la misma y no se controló el ingreso a la asamblea. Cuando nos retiramos empezaron a acreditar a la marchanta, hay fotos de esas irregularidades y hay filmaciones donde se ve claramente quienes empezaron la agresión” manifiesta Jorge Rego.
Jorge “Catola” Rego asegura que “No me van a doblar el brazo, no voy a dejar de luchar por la dignidad de los municipales, con la junta en contra igual me voy a presentar a las elecciones, porque es el momento de decirle basta a esta dirigencia entreguista, que lo único que sabe hacer son negocios para ellos, vaciar la obra social y robarse la plata de los jubilados en la Cámara Compensadora. Compañeros municipales no aflojen, no se entreguen, si estamos juntos esto lo podemos cambiar; nos merecemos un sindicato mejor, una obra social de excelencia y juntos vamos a poder defender los derechos y la dignidad de todos los compañeros y de nuestros jubilados”.