INAUGURAN LA CALLE “DR. CARLOS DI TARANTO”

 

 

El próximo miércoles 13 de octubre a las 17.30Hs. en la puerta de la casa que fuese del Dr. Carlos Di Taranto se realizará el acto de inauguración de la calle que lleva su nombre; dicho cambio fue sancionado por el Honorable Concejo Deliberante de La Matanza, a instancias de un proyecto presentado por el, entonces, Concejal Rotilio Chamorro (Ordenanza 24.138).

Para homenajear a un médico que es el orgullo de toda una ciudad, pensamos que sus palabras, publicadas por el Diario “Condie” del colega y amigo Marcos Flores (también vecinos de Ciudad Evita), era la mejor opción para una semblanza del Dr. Di Taranto.

La iniciativa del acto y su organización estuvo a cargo de Ricardo Juan “Caito” Thus y Carlos Marcelo “Tito” Luna.

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RECORDANDO AL DOCTOR CARLOS DI TARANTO

(http://diariocondie.blogspot.com.ar/2015/07/recordando-al-doctor-carlos-di-taranto.html)

Ante esa merecida decisión del Concejo Deliberante de la Matanza de cambiar el nombre de la calle El Cedro por la del “Doctor Carlos Di Taranto” de la Ciudad Evita, donde vivía, curaba y militaba, incluimos una charla que supo ofrecernos para su testimonio en el libro “Horma y Timón

 

“Al casarme, yo trabajaba en el Hospital Piñeyro, me recibí  e ingresé de subteniente médico en el Colegio Militar, y me toco la primer revolución del 16 de junio en el 3 de Infantería cuando fue bombardeado. Tengo una nota de felicitaciones.

Esa participación en la revolución fue porque no pude llegar al Colegio Militar ese día, el lugar más cercano que tenía era el 3 de Infantería así que me patee las cuadras desde la General Paz hasta el 3.

Allí me encontré con suboficiales amigos que vivían en Ciudad Evita. También muchos oficiales, a la vez que me presentaron a otros que no los conocía, yo vivo en esta casa desde mayo de 1954, entonces por ese conocimiento con estos oficiales y suboficiales me dije: encontré un lugar lindo para presentarme. Aguantamos el bombardeo, tratamos heridos, encontramos a un chico muerto en Crovara que lo habían ametrallado y todas las cosas que sucedieron en la guerra civil.

Terminé el contrato, me dieron de baja en el Colegio Militar el 31 de agosto del ‘55, el ambiente de los tres últimos meses con estado de sitio, con el refuerzo de guardia, vivíamos prácticamente en el Colegio Militar, y cuando me dieron de baja yo empecé a moverme por acá porque ya podía actuar políticamente y vino la revolución, así que nos tocó la peor parte.

En definitiva en el Ejército la pase muy bien, pero yo tenía la ventaja de tener dos hospitales, yo trabajaba en Ezeiza y en el Piñeyro, la ventaja mía era que atendía muchas familias de soldados¸ y muy satisfecho de haberlo hecho.images-copy

Después de junio del 56 comienza la dura represión. En Ciudad Evita se realizaban ‘razzias’ (Una razia o razzia – del francés razzia, ‘incursión’, y éste del árabe argelino ġaziya (غزية), ‘algara’- es un término usado para referirse a un ataque sorpresa contra un asentamiento enemigo, íntimamente asociado a la Yihad, que han practicado diversos grupos musulmanes) muy importantes en la que caía medio barrio, se llevaba a la gente para fajarla, tenían que meter miedo sino todo iba a parecer una joda. Es realmente cuando empiezo a actuar en política después de mi desvinculación con el Ejército, antes lo había hecho cuando el inicio del peronismo, cuando vivía en Mataderos, con Borro, que era el hombre máximo de Mataderos. Con quien tuvimos y seguimos teniendo una buena relación.

Cuando se produce la revolución del 9 de junio del ‘56 me tocó vivir una situación que nunca la entendí bien. Porque si ya sabía todo el mundo que se iba a producir la revolución, ¿cómo es que los responsables se empeñaron en hacerla?.

Le cuento, yo venía una mañana del Piñeyro en el colectivo 10 que pasa por la puerta del cuartel, viajaba en el mismo un milico que había sido jefe mido, mi profesor cuando entramos en el Piñeyro, me dice ¿Cómo te va Di Taranto?; bien le respondí ¿cómo está usted?, mientras pensaba éste también debe estar en la joda, porque ni bien entra me pregunta ¿Cuántas camas vacías tenés?. Eso me sirvió después, pero mucho para meter cizaña.carlosditaranto-copy

Yo como todo el mundo sabía sobre el 9 de junio. En el barrio había como 20 suboficiales complotados que lo sabían todo al detalle, más que eso el 8 a la noche venía en el 10, cuando se levanta un suboficial que venía vestido con uniforme dentro del colectivo, levanta la ventanilla y empieza a gritar ‘a ver como se portan esta noche’”.