Por Prof. Joaquín G. Puebla
“Línea blanca – SAMSUNG INAUGURA UNA FÁBRICA DE HELADERAS – El 28 de septiembre, la marca empezará a producir 6 modelos con tecnología de punta” el pasado 10/09/2017, en el suplemento de economía, el diario Clarín anunciaba que la empresa coreana, junto a una firma local, inauguraban un fábrica de heladeras radicada en el vecino municipio de Cañuelas (https://www.clarin.com/economia/economia/samsung-inaugura-fabrica-heladeras_0_Sk5kGUlc-.html).
Casi 1 años antes (31/08/2016) habían anunciado la radicación de la fábrica, también en el suplemento económico del “Gran Diario Argentino” con el siguiente titular: “SAMSUNG FABRICARÁ HELADERAS EN CAÑUELAS” (https://www.clarin.com/economia/economia/samsung-fabricara-heladeras-canuelas_0_Syw5e24o.html).
No hace mucho un empleado de una empresa Argentina radicada en el parque industrial de Cañuelas y que, casualmente, se dedica también a producir en la denominada “línea blanca” (lavarropa, heladeras, secarropas, etc.) me comentó que “La inversión de nuestra empresa la teníamos programada, en principio, para instalarnos en el parque industrial de La Matanza” y agregó que “Nos convenía más por la ampliación de la autopista ‘Pte. Perón’”.
Este empleado de una importante empresa local sostuvo que “Teníamos casi todo apalabrado, el lote a comprar, los planos, las maquinarias, todo estaba muy avanzado; solo teníamos que hablar con gente del municipio para comenzar a invertir”, después de reflexionar unos minutos, sigue con su relato y señala que “Nos mandaron a ‘conversar’ con un tal Joselino (me dijo el nombre pero justo no se oye bien, solo sale el apodo). Este tipo, de malas maneras, nos recibió y sin muchas vueltas nos puso el precio. Nosotros tratamos d explicarle que era una importante inversión y que habría bastantes puestos de trabajo pero no hubo manera de sacarlo de su postura. Quería plata y al contado. Muy sorprendidos le preguntamos cuál era el precio para traer a La Matanza una importantísima inversión productiva que generaría más de 200 puestos de trabajo genuinos”.
El empleado de una importante empresa local toma un sorbo de café y con bronca me cuenta que “Sin pelos en la lengua nos dice: ¿cuánto van a invertir ustedes? Nosotros le decimos la cifra y este Joselino, sin sonrojarse, nos pide la misma cantidad de dinero para que el proyecto marche sin problemas. Nos levantamos y nos fuimos” y después agrega que “Intentamos hablar con Fernando Espinoza y con Verónica Magario, no nos recibieron, no respondieron a nuestros llamados, intentamos llegar por mil maneras y después de un tiempo, nos cruzamos con estos personajes en una reunión social y le explicamos que nos pasó pero sin dar nombres”.
Ya exaltado el empleado de una importante empresa local nos dice que “Nos escucharon muy atentos, nos dieron su tarjeta y nos pidió que lo llamáramos ante cualquier problema pero que debíamos hablar con ‘Joselino’ primero que él nos iba a resolver todos los problemas” y finaliza diciendo “Obviamente nos olvidamos inmediatamente del tema y comenzamos a buscar locación en otro lado y nos fuimos a Cañuelas donde nos recibieron de diez, no nos pidieron plata, nos resolvieron todos los problemas y nos dieron una mano bárbara. Estamos muy contentos de invertir en Cañuelas”.
No sé, ¿será pura casualidad?