Por Prof. Joaquín G. Puebla
Reconozco que hay veces que nuestro medio es más que incisivo y molesto, que estamos señalando casi constantemente deficiencias importantes en la gestión municipal pero también hay que reconocer acciones que, aunque parezcan mínimas, son importantes en los tiempos que corren.
En las últimas semanas hemos vivido una ola de calor que nos frío el bocho a todos, con temperaturas muy altas y, pese a eso, uno debe salir a realizar trámites que son, en ese momento, impostergables.
Uno de esos trámites es sacar o renovar la licencia de conducir. Hoy para hacer eso hay que armarse de mucha paciencia porque hay una avalancha de personas que deben realizar dicho trámite debido que, en su momento, por las restricciones aplicadas para enfrentar la pandemia provocada por el Covid se extendía la fecha de caducidad de las licencias de conducir en toda la provincia de Buenos Aires. Durante más de un año no se realizaron ni nuevas licencias ni renovaron las vencidas.
Hoy hay una enorme cantidad de vecinos que necesitan realizar dicho trámite y a pesar de la buena voluntad de los trabajadores y las autoridades de dicha repartición municipal, es inevitable que se produzcan largas y agotadoras colas para finalizar el mismo y si, le agregamos el calor intolerable que hizo estás últimas semanas, se hace muy complicado mantener la paciencia y la cordura.
Amén de esto, algunos comerciantes (de las inmediaciones de las repartición municipal dónde se realiza el trámite) se aprovecharon de la ocasión y subieron los precios para “hacerse su agosto” (La expresión “Hacer el agosto” hace referencia a la recolección, y significa entrojar o almacenar la cosecha de cereales y semillas, y, por ende, hacer su negocio o lucrarse, aprovechando ocasión oportuna para ello); sin ir más lejos cobraban una botella de agua mineral 150 a 200 mangos.
Más allá de todo esto desde el departamento ejecutivo del municipio se dispuso que personal municipal de Defensa Civil y de Tránsito y Transporte asistan a los vecinos que realizaban el trámite.
La asistencia del personal municipal se reflejó en la entrega gratuita de botellas de agua mineral y de la instalación de gazebos y sillas para resguardar del sol a los que debían hacer las largas colas; también hay que destacar el esfuerzo de los trabajadores municipales, del sector de licencias, que redoblaron su esfuerzo para agilizar el trámite y que el mismo sea más rápido y expeditivo.
Algo es algo pero cuando ese algo se da en un momento complicado tiene otro valor.