“Semanario Quinto Poder”, dialogo en exclusivo con Andrés Venice, presidente del CIPU, (Centro de Industriales Panaderos Unidos) La Matanza Sur, institución que no se olvida de la comunidad de la cual proviene, y cada tanto nos depara una sorpresa para compartir en comunidad, como hace tiempo la torta mas larga del mundo, hace poco el festejo del cumple del Padre Mario, y hoy colaborando en silencio, para aliviar la situación de los inundados de nuestra querida Matanza, hablamos de todo un poco y sobre diferentes temas, esto nos decía el presidente de la Institución:
QP: Andrés Venice ¿están trabajando mucho, están creciendo con la institución?
A.V.: “Si, trabajando mucho, día a día viene mas gente, hoy mínimo, como todos los viernes tenemos 50 personas, tratamos de hacer lo mejor que podemos, vamos resolviendo los problemas que se presentan, lo hacemos solos, ya que no tenemos ayuda del municipio”.
QP: ¿Hace cuanto tiempo arrancaron acá, en este predio?
A.V.: “Y hace unos 10 años mínimo, hace 4 años que estamos en el salón nuevo, en el que estamos ahora”
QP: Por lo que observamos es democrático, el sistema de llevar adelante la presidencia del CIPU
A.V.: “Si, este es ya el tercer mandato”
QP: Uds. decidieron tener su propio Centro, ¿a raíz de diferencias con el Centro de San Justo?
A.V.: “No, para nada, cuando nosotros decidimos crear el CIPU, San Justo sabia y estaba de acuerdo, los problemas vinieron después, porque la idea era, que esto sea como una delegación, que agilizara las necesidades de la gente que viene de los kilómetros, que les cuesta llegar a San Justo, la idea era laburar en conjunto, esa fue la idea de un principio, pero después con el tiempo, empezaron a surgir problemas, y eso derivo en que no vayamos mas a San Justo”.
QP: ¿Cómo esta esa relación con el otro Centro?
A.V.: “Esta en stand by, hace un mes tuvimos una reunión donde fuimos unos 60, 70 panaderos, tipo una asamblea, conversamos, pero decidimos no seguir yendo, porque no tenemos respuesta de ningún tipo, y no nos convence la forma de trabajar que ellos tienen”.
QP: Uds. ¿notan que crecen más solos que unidos al Centro de San Justo?
A.V.: “Yo pienso que crecer más, seria estar todos juntos, no hay dudas de eso, pero falta mucho para que coincidamos en las ideas con la gente de San Justo”.
QP: Hoy, ¿cuál es el punto de quiebre para que no estén todos juntos?
A.V.: “Hay muchos puntos de quiebre, nosotros necesitamos que la institución nos represente, nosotros pensamos que todas las instituciones tienen que representar a los asociados, y “el CIP de San Justo no trabaja para los panaderos, no nos vemos representados bajo ningún punto de vista”.
QP: ¿Uds. ¿Ven al CIP de San Justo, que trabaja como una empresa privada, más que como una institución, para sus afiliados?
A.V.: “Exactamente, es un beneficio para cuatro o cinco personas, y los demás están viendo de afuera”.
QP: ¿Cuál es el principal beneficio que tiene el panadero asociado al CIPU, que hace la diferencia?
A.V.: “El beneficio, es estar todos juntos, solucionar el problema día a día, de saber que a cualquier horario tenes un panadero para llamar, conversar las cosas en buenos términos, para que se solucione, como por ejemplo el tema precios, disfrutar de este salón propio, donde el asociado pueda venir, disfrutar, compartir”.
QP: El tema del salón, ¿es para uso del asociado, tiene algún costo?
A.V.: “El asociado pide el salón y lo tiene, se paga un gasto mínimo, que es para el mantenimiento, limpieza, seguridad, lo mínimo indispensable para la manutención, acá no se lucra con los compañeros asociados, esto es de todos de verdad, esto lo hicimos a pulmón entre todos, esto no tiene dueño”.
QP: ¿Y el servicio de catering, el que contrata el salón esta obligado a contratar con alguien específico?
A.V.: “No, para nada, acá existe la libertad del asociado, de pedir el salón y contratar el servicio donde quiera, acá no están obligados a nada, como ocurre en otro lado”.
QP: Hablando de un tema candente, como son las inundaciones que sufrimos en la zona donde uds. Desarrollan su actividad, sabemos que están colaborando con los vecinos inundados, ¿qué tiene para decirnos?
A.V.: “De nuestra parte es lo mínimo que podemos hacer, nos juntamos entre todos que somos muchos, y poniendo un poquito de pan cada uno, hacemos llegar el pan a la gente, esto es así”.
QP: ¿Cómo ve la situación del vecino, relacionada con la ayuda y la llegada del municipio?
A.V.: “Y, la llegada y ayuda del municipio, es hasta por ahí nomás, porque sino no estaríamos nosotros, ni otra gente que se suma a ayudar, como con la carne, con los fideos, con Art. de limpieza, ropa, y demás”.
QP: ¿Uds. colaboran por su cuenta, no están bajo el ala municipal?
A.V.: “Estamos por nuestra cuenta, como el CIPU, ayudando a nuestros vecinos que son los que nos compran el pan todos los días, es nuestro granito de arena en esta circunstancia tan penosa, colaborar con la comunidad, ponemos 10 kilos de pan cada uno y tenemos gente conocida que distribuye el pan entre los evacuados y los vecinos que realmente necesitan”.
QP: ¿Esto lo hacen totalmente fuera de la política?
A.V.: “Totalmente fuera, no lo hacemos por ningún rédito político, esto lo hacemos porque así se dio, y es solo devolverle un poquito a la sociedad de la cual somos parte y así lo entendemos, en lo personal y como CIPU, como institución, es nuestra obligación, estos vecinos son los que nos dan de comer todo el año ”.
QP: Uds. Siempre organizan algún festejo por el día del Niño, ¿este año piensan hacer algo?
A.V.: “Este año por la situación que se esta pasando, no hay mucho para festejar, hay pibes que están con un metro de agua en sus casas, y no es un clima de festejo”.
QP: Venice, ¿cómo se está desarrollando el tema comercial, como viene el año hasta acá?
A.V.: “Bien no están las cosas, hace tres años que no aumentamos el precio del Pan, y nos encontramos que los sueldos aumentaron 4 o 5 veces, los insumos lo mismo, y nosotros no podemos aumentar el Precio del Pan”.
QP: ¿Cuál es la forma de mantener esta situación?
A.V.: “El tema es no levantar el precio del Pan, tenemos mucho problema con la clandestinidad, mucha gente vendiendo en las casa, gente en negro, y contra eso no podes competir, cuando tenemos una panadería habilitada, con 4 o 5 personas en blanco, y tenes que comparar con un vecino que te vende pan por una ventana, tenes una distancia tremenda, hablando de costos”.
QP: ¿La venta como esta?,¿ disminuyo o se mantiene respecto al año pasado?
A.V.: “Disminuyo mucho en los mostradores, por lo mismo que decía antes, porque hay muchas bocas de expendio, clandestino”.
QP: ¿El problema de la disminución en las ventas, es también porque vienen de otro distrito a vender Pan a La Matanza?
A.V.: “Si, pero también el problema esta acá, cualquiera comprar una maquinita una bolsa de harina y empieza a fabricar Pan, y eso no hay forma de combatirlo, porque esa persona hace eso por la necesidad de trabajar, pero no es justo, con aquel que tiene la panadería habilitada, con el persona en blanco, con la seguridad y la higiene que tiene que tener para trabajar, y que muchas veces es perseguido por la municipalidad, por el ministerio de trabajo, por el sindicato, y el otro esta haciendo pan en su casa y no lo jode nadie”.
QP: ¿Qué solución tiene esa problemática? Que es grave por lo que ud. dice
A.V.: “No sé qué solución tendría eso, una creo es que haya mas fuente de laburo, por un lado, porque entendemos que esta gente a pesar de perjudicarnos por un lado, sabemos que necesita trabajar, y si no labura tiene que salir a afanar, la gente tiene que estar laburando, lo que necesitamos es estar en condiciones equiparadas, pero eso no depende de nosotros”.