Por Prof. Joaquín G. Puebla
La insoportable levedad del ser (en checo: Nesnesitelná lehkost bytí) es una novela, clasificada a veces como filosófica (opinión que no comparte su autor, quien sitúa su obra —incluyendo específicamente esta novela— más allá de la filosofía y la psicología, tratando de encontrar la esencia existencial de los personajes ) del escritor checo Milán Kundera, publicada en 1984.
Ambientada en Praga durante 1968, la Insoportable levedad del ser trata de un hombre y sus dudas existenciales en torno a la vida en pareja, convertidas en conflictos sexuales y afectivos. La novela relata escenas de la vida cotidiana trazadas con un profundo sentido trascendental: la inutilidad de la existencia y la necesidad del eterno retorno de Nietzsche por el cual todo lo vivido ha de repetirse eternamente, sólo que al volver lo hace de un modo diferente, ya no fugaz como ocurrió en el principio.
“El hombre nunca puede saber qué debe querer, porque vive sólo una vida y no tiene modo de compararla con sus vidas precedentes ni enmendarla en sus vidas posteriores”
La conjunción de ambos factores, existencialmente antagónicos, valdrían a los personajes para dar un sentido propio y singular a la vida. La acción de los personajes está estructurada a partir de varios factores: histórico-político, filosófico, psicológico y artístico, en el marco de una experiencia franqueada por el experimento socialista y la Guerra Fría.
En 1985, el año siguiente de su publicación, la novela sería galardonada con el Premio Jerusalén. Tres años más tarde La insoportable levedad del ser sería llevada al cine de la mano del director Philip Kaufman, obteniendo un aceptable éxito.
En 2006, el libro se edita por primera vez en el país del autor, República Checa, alcanzando récord de ventas.
La campaña para las PASO está llegando a su etapa final y en el oficialismo todos son cuestionamientos y las certezas brillan por su ausencia. La división en el oficialismo cada vez se profundiza más y, por primera vez dirigentes, con miles de batallas electorales en el lomo, no garantizan un triunfo en la interna (las PASO) y aún menos en las generales de octubre.
Pero el insoportable deseo de ser motoriza todo el esfuerzo de los candidatos. Aclaremos, que es solo el esfuerzo de la Verónica y de Fernando, porque la mayoría de los candidatos del oficialismo, a nivel local, brillan por su ausencia. Algunos aducen enfermedad y, otros, directamente no aparecen ni siquiera en los actos.
Estamos transitando las últimas horas hasta que se vote y las chances de Heraldo Cayuqueo crece al ritmo de las decepciones de los dirigentes del oficialismo respecto a sus candidatos.
Unas inocentes preguntas que fui haciendo a cada militante y dirigente que me cruce en estos últimos días, confirmo brutalmente algo que había adelantado en editoriales anteriores. La pregunta fue la siguiente: si Fernando es Vicegobernador y Verónica es Intendente ¿Fernando seguirá conduciendo?, todos respondiendo que no, porque él ya se fue del distrito, no ahora sino hace cuatro años. A partir de esta tajante respuesta, repregunté: si Fernando no conduce, Verónica, en su calidad de Intendente del distrito ¿conducirá políticamente al peronismo matancero?, no, me contestaron, manejara la municipalidad pero ella no nos va a conducir. Ante esto ¿quién va a conducir?, acá las respuesta variaron un poco, la mayoría contestó que no saben que eso se va a comenzar a discutir después de las elecciones y algunos (muy pocos) afirmaron que puede ser que Raúl “Papa” Magario asuma algún rol “delegado” en dicho campo. Obviamente la conducción no se impone en política, sino que es una facultad delegada por quien es conducido.
La única manera que, tanto Fernando como Verónica sean refrendados como conductores políticos del peronismo matancero será que obtengan un triunfo arrollador tanto en las PASO del próximo domingo como en las elecciones generales de octubre; cosa que dudo por el clima que existe entre la militancia y dirigencia peronista y ni que hablar, de los vecinos matanceros.
Otro dato a tener en cuenta que está directamente relacionado a los intereses de los dirigentes políticos del oficialismo y, que lamentablemente, es una cuenta pendiente, pasa por los acuerdos políticos. “Yo acorde con Alberto (por Balestrini)” comentó un destacado dirigente peronista y explicó que “Cuando enfermo Alberto, en la urgencia y por respeto, no hablamos del tema con Fernando. Paso el tiempo y Fernando se hizo el distraído para luego desaparecer y dejar de atender a los compañeros. Con Verónica hablamos varias veces pero siempre fue ad refendum de Fernando. Nunca nos contestaron y si se comprometieron a algo – aunque fuese una solicitud mínima – nunca hubo una respuesta satisfactoria y, ni siquiera, un explicación circunstancial por no cumplir con lo pactado o solicitado”.
En pocas palabras los dirigentes del peronismo matancero están a la espera del resultado electoral para volver a sentarse a discutir nuevos acuerdos políticos. En función de esto, no sería descabellado pensar que, más allá del apoyo del electorado o no, la Verónica ganará por muy escaso margen las PASO, para que los dirigentes tengan un elemento de presión para forzar esa negociación. Se cae de maduro que muchos han hablado con la dupla Gdansky – Cayuqueo y que el próximo domingo sea bastante factible verlos trabajando abiertamente con ellos o en todo caso, no trabajando contra ellos, no sé si me entienden…
DEL CAJON DE HERMINIO A LOS NARIGUETADOS BONAERENSES
Un experimentado dirigente político matancero y, también candidato, me comentaba hace un par de días que “La denuncia contra Aníbal (por Fernández) es como la quema del cajón hecha por Herminio (por Iglesias) en el cierre de la campaña del ’83 (en el acto de cierre de la campaña de 1983 Herminio Iglesias quemó en pleno acto un féretro y muchos aseguran que dicha acción hizo cambiar de parecer a muchos que iban a votar al peronismo y que a partir de la misma Raúl Alfonsín pudo alzarse con el triunfo)”.
Otro destacado peronista, que observa la campaña desde la periferia (dice que no lo convocaron y que directamente lo dejaron afuera), analizó que “La denuncia contra Aníbal no impacta en los votantes que iban a votarlo, igual van a votarlo pero si impacta en el electorado independiente que estaba analizando votar a Scioli y a Domínguez; es decir, la denuncia complica las chances que hubiese tenido Scioli de ganar en la primera vuelta”.
Aníbal Fernández, más allá de sus peculiaridades personales, es un gran polemista. Personalmente creo que es un político con más pasado que futuro pero, a partir de las denuncias hechas en su contra, lo único que lograron es agrandarlo y el contrataque del “Bigote” ha sido mortal, por un lado afirmó que “Si (sus competidores por Domínguez y Espinoza) quieren hablar de narcotráfico que dejen de comprarle a los transas” y horas después, la mismísima lilita Carrió salió públicamente a afirmar que “El poder no solo está en la droga. Este poder mata y Cristina lo sabe perfecto. La interna del PJ es una pelea por los carteles de la droga” y apuntó contra el intendente de La Matanza y precandidato a vicegobernador, Fernando Espinoza, al asegurar que “Julián Domínguez lo lleva de vicegobernador a Espinoza, que maneja la droga en La Matanza”. 
Es decir, denuncias van denuncias vienen y sin querer o queriendo, abrieron la caja de Pandora y no saben que puede llegar a salir de eso o, peor aún, no saben cómo cerrarla.
A partir de todo esto me pregunto, ¿Qué pasaría si nuestro Fernando no ve coronadas sus expectativas y su lista pierde frente a la de Aníbal? O peor aún, ¿si en La Matanza gana Cayuqueo y en la provincia gana Aníbal?, o más malo todavía, ¿si pierde Fernando y gana la Verónica?; flor de lío tenemos en puerta. La única salida es una victoria abultada en el distrito y un buen triunfo a nivel provincial. Fernando es un hombre con suerte, pero hay veces que no habría que forzar tanto a la suerte, porque la fortuna acompaña a aquellos hombres que no la tientan, pera aquellos que suelen tomar un riesgo extremo puede abandonarlo enseguida.
Para serles sinceros creo que el único beneficiado de todo esto es Felipe Solá porque fue el primero en hablar del tema públicamente y desde el principio le apuntó al “Bigote Fernández”.
Hay dos datos a tener en cuenta, por un lado el Movimiento “Evita” anunció públicamente su respaldo a Aníbal Fernández en la provincia y en lo local a Verónica Magario. También el FAP se solidarizó con Aníbal.
Como dije anteriormente el horno no está para bollos, el domingo nos puede deparar cualquier resultado y a partir del lunes habrá decisiones y acciones que pueden modificar el mapa político matancero.