Por Prof. Joaquín G. Puebla
Yuxtaposición: La etimología de “yuxtaposición”, del inglés medio, del latín y del francés, esencialmente significa colocar el objeto X cerca del objeto Y. Juxta: esa es la palabra latina para “junto a”. En cuanto a la competitividad político-electoral, la yuxtaposición puede referirse a la rendición de cuentas como un arma contra el adversario político.
“EL DIPY FUE DENUNCIADO POR ABUSO SEXUAL POR UNA MILITANTE LIBERTARIA”, de esta manera tituló el portal de noticias, LAPOLÍTICA ON LINE (https://www.lapoliticaonline.com/conurbano/el-dipy-fue-denunciado-por-abuso-sexual-por-una-militante-libertaria/), sobre la denuncia en contra del cantante bailantero.
“El ex candidato de Javier Milei en La Matanza, el cantante de cumbia El Dipy, fue denunciado por abuso sexual por parte de una militante libertaria, que lo acusó de haberla engañado con ofertas laborales en el Estado para llevarla a su casa, donde denuncia que fue abusada en tres ocasiones” señala la nota y agrega que “En ese contexto, como primera reacción, en el armado libertario de La Matanza se despegan del cantante y aseguran que no hablan con él desde octubre”.
Lo del Dipy puede ser una movida política o, según creo, algo verídico porque en el ambiente que se mueve es muy común que ocurra este tipo de situaciones; pero me llama poderosamente la atención la poco o casi nula trascendencia de la noticia en los grandes medios nacionales de prensa (¿estarán “ensobrados”? según afirma el Presidente Milei cuando algún periodista hace preguntas incomodas).
No fue así como trataron el caso de la denuncia por “Presunto Abuso Sexual” contra el Intendente matancero, Fernando Espinoza, donde los medios masivos de comunicación lo hostigaron de manera inmisericorde (https://semanarioquintopoder.com/una-buena-para-fernando/).
Más allá de estas cuestiones judiciales (que a mi entender son importantísimas) hay un trasfondo político que casi nadie se detiene a analizar; lo que planteo tiene que ver qué hizo LLA (La Libertad Avanza, el sello partidario de Milei) con los votos obtenidos en La Matanza. Esos votos le permitieron a LLA ingresar tres Concejales en el Honorable Concejo Deliberante de La Matanza.
Los Concejales “Anti Casta y Libertarios matanceros” (Lorena Ramos, Ricardo Lococo y Ana María Barbetti) apenas asumieron sus bancas se dividieron en dos bloques: Ramos y Lococo por un lado y Barbetti por otro.
A casi un año de la asunción, el trabajo legislativo de los tres deja mucho que desear dado que el mismo se basa en las denominadas “Minuta de Comunicación” que, simplemente, es un pedido al Departamento Ejecutivo municipal para tapar un bache, pedir poner o repara luminarias, limpieza de una esquina y muchas cosas más por el estilo.
Si bien las “Minuta de Comunicación” es una herramienta legislativa muy usada, la misma apunta a generar “estadísticas del trabajo de un edil” y, generalmente, no resuelven los problemas de vecino. Por ahí en otros distritos o municipios bonaerense e incluso, a nivel nacional; esas estadísticas tengan sentido, pero en La Matanza, no es así. Si revisamos muy por encima el trabajo legislativo de estos tres Concejales de LLA solo vamos a encontrar “Minuta de Comunicación”. No presentaron ni un proyecto de Ordenanza (acompañaron varios proyectos elaborado por Concejales de otros bloques, pero de su autoría no se ve nada), ni un “Pedido de Informe” a las autoridades municipales; solamente presentaron “Minuta de Comunicación” y, encima, se juntan con otros actores políticos para cometer delitos contravencionales, como es el caso de la obra clausurada de Marcos Galperin (https://semanarioquintopoder.com/garpe-rin-el-hombre-de-la-billetera/).
La Matanza es una provincia (eso es innegable) por la cantidad de habitantes, las dimensiones del municipio y otros tópicos. Esta situación genera un enorme problema institucional y, hasta una violación constitucional flagrante, por la muy escasa representación institucional que tiene el vecino matancero porque la forma de gobierno de nuestro país es Representativa, Republicana y Federal; eso implica que los matanceros no estamos representados proporcionalmente como indica la constitución.
Ser Concejal en La Matanza requiere tener una enorme cantidad de votos que, en varias provincias y municipios del país, esa cantidad de votos definen elecciones la elegir un Intendente o, en algunos casos, un Gobernador.
Ser Concejal en La Matanza es trascendente porque se representa a una enorme cantidad de vecinos que necesitan que le resuelvan cuestiones vitales y, aún más, en la complicadas y difíciles épocas que estamos transitando.
Es valioso recorrer el distrito y anotar las falencias de infraestructura que se vayan viendo y hacer, a posteriori, una “Minuta de Comunicación”; pero es imprescindible que nuestros representantes hagan un esfuerzo más en las graves necesidades del pueblo matancero, como es controlar el sistema de salud municipal, ver cómo trabajan los comedores populares, ver dónde están y cómo funcionan esos comedores; analizar y presentar proyectos alternativos a la cuestión de las inundaciones o, simplemente colaborar para sobrellevar la pandemia del Dengue que está asolando nuestro distrito.
Entiendo personalmente que cobran poca plata por ser Concejales (entre 600 a 700 mil pesos), pero los vecinos no lo votaron para que ganen enormes dietas; el vecino matancero los votó para que los ayuden a soportar, sobrellevar o resolverles los enormes y graves problemas que tienen.