Dialogamos con Alejandro Salomón, Sec. Gral. de los “Misioneros de Francisco” en La Matanza, y solicitamos su opinión sobre la reunión del nuestro Papa Francisco con el Presidente Javier Milei. También lo consultamos sobre la situación en las barriadas más pobres donde realiza su trabajo social.
Salomón es una persona que llama la atención: pertenece a una institución denominada “Misioneros de Francisco”, está casado con una mujer cristiana, pero él es de origen libanes y, a su vez, de religión islámica.
QP: Salomón, estamos viviendo una época complicada en lo económico y en lo político, pero también una época de mucha confusión de lo ideológico y de lo que tiene que ver con la fe. ¿Por qué, se plantea que usted, me está preguntando esto? Yo le estoy preguntando esto a una persona que tiene particularidades religiosas como es usted, lo cual le hemos hablado. El presidente Milei en su momento insultó muy mal al Papa, y hace poco se reunieron, abrazaron, hablaron. ¿Cómo viene todo esto? ¿Cómo lo ven ustedes a esta situación? Usted es un Misionero de Francisco. ¿Cómo toman este mensaje contradictorio?
AS: “Muchos cuando Francisco recibió al presidente Milei en el Vaticano se sintieron mal. Y la verdad es que, desde mi óptica, lo que yo vi es entenderlo a Francisco, porque Francisco no le puede decir que no. Porque Francisco es un hombre religioso, y la verdad que abraza a todo el mundo. Inclusive a aquel que se pudo acercar a Francisco con otra intencionalidad, de cerrar una grieta, por recomendaciones. La verdad que no voy a poner en tela de juicio si fue genuino o no lo del presidente Milei en ir a verlo al Papa Francisco.
Reconozco que el Papa Francisco actuó como hombre de fe, y por eso lo recibió. Respecto a lo que está aconteciendo en el mundo es, precisamente, por un problema de fe. Es decir, queda muy claro que Francisco en varias encíclicas y en varios mensajes, él dice que se ha corrido del centro de la escena al humano, y que el dios dinero, el capital y todo ese tipo de cosas son las cosas que empezaron a prevalecer. Si bien hay una situación de crisis mundial donde las guerras están creciendo, son guerras centralmente vinculadas entre la fe y la no fe. La no fe es la no fe a lo espiritual, y la fe es la fe vinculada a lo intrínsecamente espiritual. No hay peor pobreza para el ser humano que la pobreza espiritual, no es la económica. Y ahí es donde están esos dos choques de civilizaciones, como decía Huntington, pero en definitiva son choques de valores no como él los plantea, sino como los plantea el Papa Francisco. Es decir, estamos asistiendo a un momento en donde se ha corrido del centro de la escena del ser humano y lo que se ponen en valor son otro tipo de cosas, como lo está haciendo este gobierno.”
QP: A eso iba. Yo, después del mensaje del presidente inaugurando las sesiones ordinarias del congreso, vi algo así como lo están planteando ustedes. Primero el mercado del dinero y, por último, la gente. Usted trabaja con gente en condiciones vulnerables. Una cosa es trabajar, militar, trabajar políticamente con ellos, o pastoralmente, y ver la realidad que viven. ¿Cómo está esa gente hoy?
AS: “La gente está extraviada en esto, porque hay una paradoja. Gran parte de la gente que hoy en la primera línea está afectada es gente que acompañó este proceso para que Milei sea presidente. Los otros días el Intendente Fernando Espinoza nos convocó a la mesa del encuentro y en esa mesa del encuentro realmente el Intendente fue muy claro. Tenemos que abrazar a todos aquellos, no importa a quién votaron, sino a aquellos que son hoy la primera línea de víctimas de estas políticas que están llevando adelante. El tema es que tenemos que revisar hacia adentro no qué pasa con Milei, sino por qué llegamos nosotros a Milei. Y que, en definitiva, Milei es un nombre. Milei es un nombre y puede ser sustituido por otro. Es marketing, es un mascarón de prueba. Es como Donald Trump. Donald Trump puede ser muy carismático y representar muy bien los sectores globales que manejan esos intereses que son contrarios a la fe. En el capítulo local lo que nosotros vemos es que abrazamos a todo el mundo. Para contarle algo, le cuento que, por ejemplo, hemos multiplicado la cantidad de gente que viene a los merenderos no sólo a buscar la merienda, sino que hemos empezado a dar mayor cantidad de platos de comida. Y agradecemos al desarrollo social del municipio de La Matanza que nos está asistiendo. Hoy, sin llegar más lejos…”
QP: Para mi es una mala noticia que cada vez haya más gente.
AS: “Es terrible. Pésima noticia. Pero esto responde a la pregunta que usted me hace. ¿Qué es lo que hacemos nosotros? Nosotros lo que tratamos es de acompañar este proceso, de tratar de enderezarlo. No vemos, sinceramente, que haya un cambio en la política, no sólo del gobierno, sino de algunos dirigentes políticos y algunos funcionarios. Y fue muy claro el Intendente Espinoza los otros días cuando dijo que queremos que se nos diga qué es lo que está sucediendo. Lo que entendemos es que hay una diferencia entre aquellos funcionarios que llevan adelante políticas de proximidad con los que más necesitan. Y vemos que son muy pocos los que se arriman.
Por eso nosotros creemos en que hay que ensanchar la base de sustento de este proceso que llevan adelante, por ejemplo, la Familia Grande, los Hogares de Cristo. Nosotros no formamos parte de ese espacio, pero articulamos políticas con ellos, como por ejemplo con el Padre Facundo Arriola. Desde el kilómetro 31 y medio hasta el kilómetro 38 de la Ruta 3, lo que tienen ahí es realmente un desarrollo de acompañamiento con todos sus sectores de alta vulnerabilidad en la sociedad matancera. Y ahí nos hemos sumado. No sólo nos hemos sumado a dar una mano, sino nos hemos sumado a decir por favor transfiéranos el nivel de conocimiento y experiencia que ustedes tienen para que lo podamos aplicar nosotros en nuestras barreadas, sobre todo en las barreadas de Villa Madero que están muy castigadas.”
QP: ¿Cómo toma esta mesa de encuentro con el Intendente Espinoza? ¿Lo ve preocupado, comprometido con esta situación que está viviendo la población?
AS: “Sí, lo veo muy comprometido el Intendente Espinoza. Veo que algunos sectores a los cuales nosotros aportamos no terminan de comprender esto. Fue muy claro cuando dijo que no alcanzan con las fuerzas del peronismo, sino que hay que sumar a todos los sectores. Hay que sumar a las instituciones intermedias, a las organizaciones sociales, a los vecinos, porque realmente lo que viene es algo que nos atraviesa a todos. Y la verdad es que ese mensaje es esperanzador para nosotros. Decimos esto porque realmente la conexión que tenemos con el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires es sólo a través de la Vicegobernadora que el otro día en una reunión estuvo muy, muy atenta a lo que decíamos, a lo que nos tocó opinar, nos acercó su número de teléfono y seguramente en estos días la vamos a llamar porque necesitamos profundizar este tipo de políticas. Porque como dice el Papa Francisco, esto se resuelve de la periferia al centro.”
QP: ¿La periferia está contenida? Porque se espera un clima complicado económicamente en los meses de acá en adelante.
AS: “No, creo que no. Sería realmente infantil decir que esto es así. Nosotros no sabemos. Le cuento algo. No solamente ha crecido la demanda en ir a buscar a los merenderos y a los comedores que tenemos una ración más de comida, ver si además de la copa de leche que nosotros servimos pueden llevarse un paquete de galletitas o algún tipo de sobrantes, sino que ha crecido exponencialmente en las adicciones. Tenemos un problema gravísimo de las adicciones. Y después vemos, sinceramente, contradicciones en el campo popular porque esto ¿en qué se vuelca? En índices de crecimiento de la delincuencia. Vemos que están muy inactivos los foros de seguridad. Ahora, los foros de seguridad no son para pedir más alarma, más patrullero. Es simplemente para concientizar de que esto se logra generando bolsones de bienestar. Y los bolsones de bienestar se generan con la proximidad de los funcionarios a la gente. No simplemente con organizaciones vacías de contenido que tienen un título. Porque la verdad que no resuelven el problema. Y no podemos estar corriendo detrás del índice de la delincuencia, hoy hubo un hecho de esta naturaleza, mañana va a pasar otro. Estamos en una transición. Y espero haberle respondido a usted de que las periferias no están contenidas ni tampoco lo van a estar por más que resolvamos el tema del alimento. Porque también va a venir el tema de la falta de trabajo. Y la falta de trabajo conlleva inmediatamente a que se disparen los índices de delincuencia y los índices de adicciones. Y esto se va a volcar en mayor inseguridad. Pero no es un problema de Matanza. Es un problema de la Argentina, de la exclusión, de lo que viene. Y la sociedad argentina tiene que reaccionar. Por eso vuelvo a repetir y rescato al Intendente Espinoza. Solamente podemos de alguna manera corregir esto tomando dos medidas. Funcionarios que no funcionan, hay que correrlos. Y por el otro lado generar conciencia, pero conciencia desde la proximidad. Esto es de alguna manera a modo de síntesis lo que nosotros vemos de los lugares, de los territorios donde nosotros trabajamos todos los días.”