¿LA POLÍTICA ENFERMA O ENFERMOS DE POLÍTICA?

 

Por Prof. Joaquín G. Puebla

 

En el cierre de listas para las elecciones PASO del próximo domingo 12 de septiembre varios espacios políticos mezclaron todo y armaron un verdadero berenjenal. Los errores mencionados fueron cometidos desde el oficialismo matancero hasta la centro derecha del distrito.

Pareciera que no hubo tiempo de sentarse a pensar una estrategia política y, aún menos, analizaron una ingeniería electoral acorde a las circunstancias que vivimos porque, las mismas, son excepcionales. Vamos a votar en medio de una terrible pandemia y acorralados por una crisis económica de formidables proporciones.

 

 

Las cuestiones mencionadas (en el párrafo anterior) son decisivas a la hora de votar porque el electorado está, virtualmente, sitiado por ambas cuestiones que no le permite ni analizar la política ni evaluar las opciones políticas que tiene a su alcance. Para ser más claro les voy a dar un ejemplo doloroso y cercano. Un quiosquero de San Justo, muy conocido el hombre, se enfermó de Covid – 19 y estuvo 15 días entubado y en coma inducido. Cuando fue recuperándose preguntó por su familia y los profesionales sanitarios le informaron que su esposa y su única hija estaban transitando la enfermedad y que se encontraban entubadas y en coma inducido como estuvo él. Su mundo pendía de un hilo y no podía hacer nada. No estaban en la misma clínica que él (su mujer en una y, en otra, su hija) y no tenía información de primera mano. En Buenos Aires no tenía familiares ni él ni su señora. Un par de amigos lo fueron anoticiando día a día hasta que le dieron de alta. Apenas salió de la internación, con la debilidad posterior que causa dicha enfermedad, corrió para ver a su hija. Le informaron que, lamentablemente, había fallecido hacia unos días. Nadie le había avisado de esta terrible noticia. Fue a ver a su mujer y le dieron la misma novedad. Un par de semana después, fue a ver su negocio y se encontró que estaba tapado de deudas, desde el alquiler hasta los proveedores pero la principal deuda era con el estado por impuestos no pagados. En fin, le tomó 10 minutos tomar la decisión de cerrar el boliche y, con lo puesto, volvió a su provincia natal.

 

 

Más allá de ser un caso terriblemente dramático les pregunto, amigos lectores, en el lugar de este comerciante ustedes ¿cómo votarían?

Pero lamentablemente no es un hecho aislado sino que una enorme proporción de población sufrió situaciones parecidas, situaciones complejas, con pérdidas de familiares, amigos, conocidos, etc. Muchos perdieron sus trabajo otros no pudieron sostener en marcha sus comercios o, sencillamente, no poder ganar lo suficiente para poner el pan en la mesa de su familia.

No hay encuestas certeras ni las habrá porque lo que sucede es excepcional y el resultado de las elecciones también lo será.

No culpo al gobierno ni a la oposición porque esto es algo que superó todo lo previsto y no hubo tiempo de generar políticas públicas orientadas a contener lo que sucedió y sigue sucediendo.

 

LA POLÍTICA EN CRISIS Y EL FRACASO DE LOS POLÍTICOS

 

La política está en crisis y, si esto es grave en circunstancias normales, imagínense lo que será en nuestra situación actual. Vamos a votar y elegir pre candidatos a legisladores para luego, en las elecciones generales del próximo 14 de noviembre, votemos a los legisladores que asumirán sus funciones el 10 diciembre.

 

 

Ningún espacio político tuvo una ingeniería electoral lógica, solo buscaron mantener espacios de poder y poner al tope de la lista no a sus mejores candidatos sino a los candidatos que mejor medían. Volvieron a poner el carro delante de los caballos porque no apuntaron a mostrar un proyecto de gobierno, una agenda política cercana a la gente.

Ninguna lista es homogénea ni vertical y, aún menos, horizontal. La dirigencia política fracasó nuevamente porque no entiende la situación que está pasando el pueblo y no les muestran una salida.

 

 

La crisis de la política pone en evidencia muchas fallas del sistema político. Nuestro sistema político es Republicano, Representativo y Federal pero la república esta herida porque, más allá de todo análisis legal, el sistema republicano no funciona porque nuestros representantes no nos representan ni tampoco son federales.

El sistema está tan dañado que no votamos ideas o proyectos, solo votamos candidatos y, un candidato, por sí solo no representa a más de 44 millones de argentinos.

 

 

El sistema de partidos políticos no existe y recuperarlo va a ser una tarea ardua y riesgosa. Está tan mal el sistema partidario que tenemos espacios políticos con más candidatos que votos.

El oficialismo y la oposición han tenido problemas parecidos a la hora de conformar las listas de candidatos y, esos candidatos, no van a resolver los problemas de la gente y no tuvieron en cuenta que, la gente, también lo sabe porque, durante la cuarentena, tuvieron tiempo para pensar y analizar opciones.

 

 

La ceguera de la dirigencia política es llamativa, consumen encuestas como si fuera cerveza pero no analizan los números que arrojan las mismas. No ven que la gente anda muy preocupada y eso lo muestran algunas encuestas. Entre los principales problemas señalan que la situación económica les preocupa mucho (35.5%), después viene la salud (24%), le sigue la seguridad (34%), la educación (10%) y, llegando al final, la política (5%).

 

 

Estamos en plena campaña se hablan de estos temas pero a ningún candidato y, menos aún, a ningún funcionario se le cae una idea para encarar las soluciones a estás problemáticas.