“QUE LOS MATANCEROS NO SE DEJEN ROBAR SU VOTO”

Por Prof. Joaquín G. Puebla

  

 

Julio Rubén Ledesma, candidato a Intendente del Frente Renovador, dialogó extensamente con Semanario “Quinto Poder” y habló de los principales temas de la agenda matancera.

Ledesma afirmó que ¿Cuándo hubo en La Matanza 85 mil votos en blanco? Dejémonos de joder” y señaló que “Nosotros sabemos que hay travesuras que el oficialismo las hace muy bien porque tiene militantes de vieja data y que van a hacer con la billetera lo más bajo que puede hacer, que es tratar de sobornar algunos fiscales

 

QP.: ¿Cómo vivió la noche del acto electoral?

J.L.: “La noche de la elección o el día en general fue bastante traumática por nervios y las expectativas que uno tenía, con los datos que manejábamos y con las encuestas. Y, obviamente, con responsabilidad de conducir un espacio muy importante. Lo sigo sosteniendo, para mí el mejor candidato, con ideas, que sabe como hacer las cosas y que ya tuvo gestión es Sergio Massa. No porque lo haya demostrado en el ANSES y en la Intendencia de Tigre, sino porque su campaña fue con propuestas claras. Tiene un equipo muy bueno, a pesar que algunos hayan abandonado el barco, donde la mayoría, fundamentalmente económico, está a la vanguardia. Tenemos un ahora un candidato a gobernador que es Felipe Solá que sabe de gestión, que salvó la provincia cuando las papas quemaban”.

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QP.: Una sorpresa los votos que obtuvo Solá.

J.L.: “Si de entrada hubiese estado acordado que fuese el candidato sería otro el caudal de votos. Me parece, es una lectura mía. Con Solá obviamente no tenemos un millonario que vaya a la cabeza como Francisco de Narváez. Estas son reglas claras, hay que financiar la campaña y evidentemente hay que tener recursos. Ahora estamos remando en dulce de leche y calmando la sed con un vaso de agua de mar con una anchoa adentro. Pero la verdad lo vivimos con mucha expectativa pero decepcionados en general con el sistema. En la Argentina siempre hacemos leyes para favorecer a determinado sector. El sector oficialista ha legislado todo lo que es la ley de procedimiento electoral en función de sus intereses. Ha bajado partidos, ha armado este sistema ‘canallesco’, que lo armó Néstor (Kirchner), que son las PASO. Además, algo muy importante, se privatizó las elecciones. O sea, privatizó la fiscalización. Es decir, para tener fiscales uno tiene que hacerle un aporte  y como vivimos en un país donde el mercado es el que impone las reglas, el mercado lo pusieron de arriba con un costo que evidentemente nosotros no pudimos llegar. Y el oficialismo sí porque tiene todos los planes sociales, planes como el salario universal, cooperativas, proyecto joven y otros más que tienen que ver con la ayuda social. Que son mínimos, pero los ponen en fila para trabajar para ellos. De esto doy fe, los juntaron en un galpón diciéndole hay que robarle las boletas a Rubén Ledesma, el que no hace la fiscalización pierde el plan. Esos son los recursos a los que acude el oficialismo. Más evidentemente habrán abonado alguna suma. Y obviamente ellos pueden cuadruplicar la cantidad de fiscales que puede tener cualquier otra lista”.

 

QP.: ¿Tuvieron problemas con sus fiscales?

J.L.: “Nosotros tuvimos el caso de la inocencia de muchos fiscales han firmado las actas de escrutinio engañados. Se está bastardeando el proceso eleccionario, la posibilidad del pueblo de elegir sus candidatos. ¿Porque lo digo?: ¿Cuándo hubieron en La Matanza 85 mil votos en blanco? Dejémonos de joder. Mentira. En La Matanza ese día el 30 por ciento menos votó porque estaba inundado. Si no vayan a (barrio) La Palangana, o los demás barrios y vean que hay toda una franja importante del electorado matancero que no se pudo expresar. Uno porque no estaban las boletas que querían votar y otros, porque la inundación se los impidió. No podían abandonar sus casas porque sabemos el grado de delincuencia que existe en el país y La Matanza no es la excepción”.

 

QP.: Usted fue el segundo candidato a intendente más votado, ¿siente que va a mejorar la cantidad de votos en octubre?

J.L.: “Yo siento que nosotros tenemos que corregir algunas cosas, que las estuvimos debatiendo ayer en un plenario de agrupaciones y que La Matanza en sí va a entender que el cambio es Rubén Ledesma, que el cambio es el Frente Renovador. Y resaltando que Massa para mí es el mejor candidato lejos porque algunos vecinos me dijeron que me iba a votar a mí pero que tenían su candidato a presidente. Yo soy el candidato de Massa, voy a fiscalizar para Massa, voy a repartir boletas de Massa pero creo que en esta oportunidad vamos a captar votos de todos los sectores y que esos votos nos pueden llegar a permitir imponernos en la elección general. Nosotros sabemos que hay travesuras que el oficialismo las hace muy bien porque tiene militantes de vieja data y que van a hacer con la billetera lo más bajo que puede hacer, que es tratar de sobornar algunos fiscales. Todos los sabemos. Trataremos de ajustar todos esos detalles y creo que nos vamos a imponer. Yo sigo caminando La Matanza. Todos los sectores que tienen la posibilidad de reflexionar, nosotros fuimos bien recibidos. Y yo vuelvo a insistir que esos 85 mil votos (en blanco) son nuestros. He tenido reuniones con el movimiento obrero representados por el compañero (Carlos) Gdansky, el compañero (Heraldo) Cayuqueo. La verdad que si el compañero Cayuqueo hubiese salido adelante me hubiese puesto muy contento porque yo estoy más que seguro que lo que le falta a la política en general y en particular es moralizarla y honestidad. Y yo te puedo garantir que cualquier hombre del movimiento obrero va a darle las condiciones morales y garantías para administrar lo que son las necesidades de todos los matanceros”.

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QP.: Todavía existen algunos problemas internos en el Frente Renovador como salió a plantearlo el concejal Abraham Delgado. ¿Cómo lo vive cuando estamos en un momento en el que hay que sumar y encontramos un personaje que hace todo lo posible para restar?

J.L.: “Yo respeto la particularidad de cada uno de los componentes del Frente Renovador. Esto es un frente compuesto por diecinueve agrupaciones de las cuales hay cinco concejales electos que luego quedaron cuatro. Yo no me meto la interna que puedan tener los concejales, trato de que se discuta y se debata en el lugar en que se debe debatir. Yo me enteré, pero no profundicé.  Creo que La Matanza conoce a sus dirigentes y sus dirigentes siempre han tenido la misma actitud. A partir que se conoce la actitud de los dirigentes, saben que clase de dirigentes tenemos hoy en el Frente Renovador, en el oficialismo y los que van a venir. Así que agregarle más, no. Ayer me comunican que el compañero que en el bloque se desgarró las vestiduras por Rubén Ledesma y la verdad me parece que las críticas hay que hacerlas en el lugar que corresponde. Acá siempre tuvo las puertas abiertas y por ahora estamos todos juntos. Nadie se ha ido ni nadie va a saltar el charco. Esta tarde tenemos una reunión todos con Sergio Massa, quien va a manejar exclusivamente el tema de La Matanza. No terminé el concepto, yo saqué más votos que Sergio Massa y no pude ser con lo que representa Sergio. ¿Qué quiere decir? Que hay una tendencia que va a posibilitar que nosotros podamos hacer una excelente elección y posibilitar que seamos los triunfadores”.

 

QP.: Días previos a las PASO, La Matanza sufrió intensas lluvias y el día de la elección ya había zonas inundadas. Seguimos teniendo viejos problemas en el distrito. En caso de llegar a la intendencia, ¿cómo piensa encarar esta problemática?

J.L.: “Mi primer decreto, ratificado por ordenanza es el plan hidráulico que vamos a comenzar por el barrio La Palanga. Lo que tenemos que atacar es el mal que nos afecta a todos. Porque la lluvia no sólo afecta a los sectores que viven cerca del río o a los asentamientos sino que afecta a la comunidad. Desde las escuelas, a los atosigamientos de los desagües, a de Ramos (Mejía), al de San Justo… Afecta a toda la comunidad. Por eso, como ratificando la necesidad del plan hidráulico, ayer en la Cámara (de Diputados) le ampliamos el subsidio y le aprobamos una ampliación del presupuesto para obras hidráulicas exclusivamente. Entre ellas está el Partido de La Matanza. O sea que ya tienen la plata, tienen la ley, tienen los elementos. Ya las obras tienen que comenzar porque le falta solamente la conformación del decreto reglamentario y darle para adelante con el endeudamiento para sanear todos los problemas que tiene La Matanza. Nosotros no es que nosotros seamos visionarios, hace 35 años que La Matanza tiene los mismos problemas y hay que salir a solucionarlos. Yo no puedo asumir como intendente y romper todos los asfaltos buenos que han hecho o los quedan o van a quedar, con el hecho que han roto el esquema natural de desagüe. Es decir, la absorción de la tierra”.

 

QP.: Claro, no se respetó la cota

J.L.: “No, no se respetó la cota, vayan a ver la autopista que están haciendo y pobre barrio Esperanza, que si no le hacen los canales de costado, que ahora voy a hacer un Proyecto de Declaración, van a sufrir inundaciones que va a tapar las casas en el kilómetro 38. Me parece que todo se hace sin pensar o pensando en una manera muy acotada, sin ver la realidad del lugar y sin siquiera conocer”.

 

QP.: Se ve en las pequeñas cosas. Están haciendo la calle Arieta peatonal y el resultado fue un desastre, un caos de tránsito en San Justo porque los desvíos de las calles están mal hechos. Falta sentido común. Si vemos en esas pequeñas cosas la falta de planificación no quiero saber las grandes obras que se están haciendo o se han hecho.

J.L.: “Se han construidos hospitales ahora. Yo voy a hacer un relevamiento con un ingeniero sanitarista para saber si esas construcciones reúnen las condiciones para ser hospitales. ¿Y sino porque están vacíos? No sólo por la falta de profesionales, hay un problema grave detrás. Yo calculo que no están aptos para ser hospitales. Me parece que La Matanza tiene que tener dos hospitales de alta complejidad. Además, hay un crédito de 200 millones de dólares del Banco Mundial para la construcción de hospitales, nadie presentó una nota para pedir parte de esos fondos para hacer los dos hospitales. Nosotros cuando encaramos los problemas, lo hacemos de una manera responsable. Como se dice vulgarmente: ‘vamos al hueso’, vamos a la cuestión de fondo. La cuestión de fondo, para resolver la problemática de la salud, hay que resolver primero la parte edilicia. Después la aparatología y después conseguir los profesionales y pagarles bien. Y tener la Policía, que tenemos la Policía de Prevención Local que yo no estoy de acuerdo con el contexto de esta Policía porque es la misma Policía porque depende del mismo Ministerio (de Seguridad) con diferente uniforme, pero les daría una tarea particular que sería cuidar las 24 horas los hospitales, las escuelas y los lugares públicos. Para esto estaría destinados esos policías. No podría destruir esos hospitales, habría que darle una finalidad como hacerlos policonsultorio o ver que es lo que se puede hacer pero no hay que destruir nada. Y a los asfaltos hay que hacerles los desagües a los costados. Y hay trabajo, hay cooperativas esperando. Hay que seguir construyendo sobre lo bien construido y si está mal construido hay que mejorarlo. No podemos tirar por la borda cualquier sacrificio que se haya hecho en estos últimos 30 años. Vas por la ruta 21 y están con todas las luces apagadas con la inseguridad que hay. Eso es una aberración que no puede suceder. O la 1001 como se están llevando los postes de alumbrado. Están destruyendo. Y eso porque no hay cuidado”.

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QP.: Estamos hablando de los hospitales que son cáscaras vacías, el único que se inauguró fue el doctor Alberto Balestrini y que no está funcionando en su plenitud. El resto son estructuras que no sabemos cuando las van a terminar. Pero hablemos del sistema de salud del municipio, se habla que el Hospital de Niños, el Policlínico San Justo y el Hospital de González Catán pasarían a la orbita provincial y que las salitas quedarían en la orbita municipal. Pero no funciona nada, como que están esperando definir. ¿Usted cómo ve este tema?

J.L.: “Me parece que eso no es responsabilizarse. Lo que hay que buscar es la solución del problema no trasladar la responsabilidad. Nosotros tenemos un problema grande que es la salud y hay que darle una solución seria, inmediata. No estoy de acuerdo con que se pase a la órbita provincial los servicios médicos que mencionas, tienen que seguir siendo municipales. Al contrario, yo apunto a la universidad municipal si es que la universidad no me hace más que esos cuatro boxes. Si no hay una universidad seria, voy a armar una universidad municipal. ¿Usted cree que es imposible? Nosotros acá (por el SEOCA) tenemos jardín de infantes, primario, secundario, dos terciario y un Centro de Formación Profesional. Miré nosotros sabemos cómo hacerlo. Las cosas tienen que ser bien paridas con proyección y no acotamiento de la proyección. La densidad poblacional de La Matanza crece y va a seguir creciendo y la necesidad crece y va a seguir creciendo y no está satisfecha la demanda. Nosotros tenemos que hacer una universidad para los matanceros porque la Universidad Nacional de La Matanza, que es una universidad de excelencia alberga en su mayoría los sectores que no viven en La Matanza, vienen de la zona oeste. Esta es la realidad. Por su prestigio, su calidad y lo que sea. Queremos una universidad para los kilómetros pero una universidad de verdad. No queremos un anexo o un kiosco que se hagan cursos online, por ejemplo”.

 

QP.: En La Matanza tenemos la Policía Bonaerense, la Policía 2, la Gendarmería, el Comando de Prevención Ciudadana, la Patrulla Municipal, la Policía de Prevención Local y la sensación de inseguridad sigue existiendo. ¿Cómo enfrentaría esta problemática?

J.L.: “Primero, para mí la inseguridad existe, no es sensación. Te doy un ejemplo, la señora que trabaja acá, que te sirvió el café, fue asaltada la semana pasada. Le robaron todo. En su cartera tenía las llaves de un auto que no era de ella, que le habían dejado para que cuide la llave y al otro día se llevaron el auto que estaba en su casa. Ayer a mi cuñado iba caminado por Morón y entre tres lo asaltan y le sacan 300 pesos y su celular. El estaba haciendo un trámite. A tres cuadras estaba la Gendarmería y les fue a decir lo que le sucedió. ‘¿Qué querés que hagamos?’, le respondieron. La problemática de la inseguridad es un tema serio que hay que enfrentarlo con mucha firmeza y para eso hay que modificar las leyes. Y como dice Sergio (Massa), acá la Justicia tiene muchísima responsabilidad. Creo que es la primera responsable sobre los hechos de inseguridad, porque el delincuente entra por una puerta y sale por la otra. Se tiene que acabar. Las leyes están, como están las picardías y los artilugios, pero el juez representa a los ciudadanos, representa al estado e imparte justicia. Entonces, ‘son cinco años’, cinco años preso. Hay que abolir el sistema dos por uno, con todos estos beneficios que hicieron. Ahora resulta que ganas más una persona que está en la cárcel que un jubilado. ¿A qué hemos llegado? Me parece que la inseguridad está siendo promocionada para que haya más delitos. Me conviene más ir a la cárcel, hacer un oficio, trabajar ahí y que me paguen, reclamo aguinaldo y vacaciones. Porque esto es así, hasta han armado un sindicato. ¿De qué manera lo combato? ¿Promocionando? ¿Alentando? Me parece que estamos completamente equivocados”.

 

QP.: Un tema relacionado con esto es el narcotráfico y en La Matanza es como que  cada día hay más droga en la calle. Es más fácil comprar drogas que cigarrillos.

J.L.: “Es una realidad. Justamente estoy leyendo un libro que se llama ‘Narcotráfico. Crimen de lesa humanidad’, escrito por Marcos García que es un candidato nuestro y amigo del Partido de la Costa. Y la verdad que es claro. Y todo lo que estoy leyendo ahí es lo que sucede, es lo que pasa. Ahí detalla claramente como se van sucediendo los pasos para que el narcotráfico siga progresando. Y lo plantea desde un ángulo ideológico y social. Todos coincidimos en que los problemas los conocemos y que en todos lados venden. Lo que pasa es que La Matanza producen. Si yo supiera dónde están las cocinas, las denunciaría. Todos nos estamos manejando por el ‘dicen, dicen, dicen’. Cuando hay alguien que tiene la altura de hacer la denuncia, hay que ver si la Justicia actúa como tiene que actuar. Me parece que en esto habla mucho, y el libro lo dice, la connivencia y la convivencia con el poder. Este es un grado de vital importancia que tiene para siga progresando el narcotráfico”.

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QP.: O sea, ¿la política está relacionada con el narcotráfico?

J.L.: “Para mí, el poder. No digo la política, el poder. Hoy me iba a una reunión en Ituzaingó y en Vergara y la autopista se amontonan las camiones que no te das una idea y cada dos semanas en veinte minutos se roban 6 ó 7 camiones a los tiros. Dicen que liberan la zona. ¿Dicen y lo sabemos hace diez años? Alguien libera. ¿Quién libera? El poder. ¿Quién tiene el poder? El que tiene el poder. Esto no hay que escaparle más, es así, sino no podría asaltar y andar libremente. De adentro de la cárcel sigue manejando con celulares y viven con altas comodidades. Si vos cometiste un delito, ¿porque tenés que estar mejor que alguien que vive en un asentamiento, que no tiene trabajo ni comida para darle de comer a sus hijos? Me parece que hay que corregir todos esos terribles errores que tenemos. Y la Justicia, vuelvo a reiterar, tiene muchísimo que ver”.

 

QP.: El intendente de La Matanza repite que tiene el presupuesto de una biblioteca pública, pero hay estudios que indican que la corrupción del distrito se lleva un presupuesto y medio por año. ¿Cómo va a enfrentar la corrupción?

J.L.: “Otro de los temas que tengo en carpeta es la creación del trabajo joven, haciendo un relevamiento de todos los comercios. Y una de las primeras medidas que hay que tomar es pagarles bien a los empleados municipales. Porque si vos, al cuidado del gallinero ponés un zorro y no un cuidador, te van a comer todas las gallinas. Los municipales para mí están mal pagos, están desjerarquizados, se bastardeó mucho la profesión municipal a través de la incorporación de compromisos políticos. En mi gobierno van a ganar bien y se va respetar las jerarquías, la antigüedad, se va a llegar a un buen acuerdo con los representantes de los trabajadores para que me cuiden la espalda. Ya no van a tener necesidad de ir con una credencial de inspector a chantajear  a un kiosquito del barrio Don Juan, que vende 400 pesos por mes y le sacan 50, por ejemplo. De esos casos, hay más o menos 100 mil. ¿Lo que hay que hacer? Tiene que haber una sola caja, trabajar para que exista una sola caja, entonces el presupuesto va a rendir. Y obviamente, si yo administro bien, si no vivo colgado del saco del gobernador ni dependiendo de las obras nacionales, es decir, tengo autoridad política y moral para ir a golpearle la puerta a quien sea y pedirle para los matanceros los que necesitan como presupuesto. Ahora, ¿quién hace un relevamiento social? Yo lo voy a hacer. Porque es necesario hacer un relevamiento social, no solamente para saber en las condiciones que vive la gente, las necesidades que existen, los chicos que están abandonados, las mujeres y hombres que son maltratados, la violencia que galopa día a día y además, andar descubriendo a través de los vecinos donde están las cocinas (de drogas) para denunciarlas y que vayan presos. Este es un trabajo que hay que hacerlo, hay que blanquearlo. En La Matanza yo voy a restructurar hasta los nombres de cada área, porque La Matanza tiene que presentarse con una nueva carpeta, con una nueva tarjeta. Con La Matanza unida, con los municipales bien pagos, con La Matanza de Salud, La Matanza conciliadora y negociadora, con el intendente atendiendo de 8 a 12, todos los días, a todo cristiano y después dedicarse a administrar. Y sábado y domingo caminar los barrios y recorrer los hospitales. Esa es La Matanza que nosotros necesitamos. Es un arduo trabajo y es mucho sacrificio. Yo tengo un concepto del cual me enorgullezco, dice que ‘el Negro’, lo que tiene es palabra. Yo te puedo asegurar que levantó la palabra como el eje principal de la construcción en beneficio de los que represento”.

 

QP.: El intendente de La Matanza fue precandidato a vicegobernador y perdió la interna bonaerense. ¿Cómo lo ve usted? ¿El que pierde sigue conduciendo?

J.L.: “Creo que va a tener un problema. (Juan) Perón decía: ‘El gana, conduce y el que pierde, acompaña’ pero después, a lo largo de los años dijo: ‘El gana, conduce y el que pierde, impugna’. ¿Qué quiere decir? Que no existe más el acompañamiento de las minorías. Cuando pierden las minorías, no juegan con las mayorías. Se ha resquebrado, se ha formado una línea intermedia entre lo que es y lo que debe ser, lo cual obviamente no escapó el tema del acompañamiento en la gestión. A mí me parece que va a haber problemas. Yo, la verdad que personalmente no tengo nada que hablar ni de Fernando, con quien me une una buena relación, ni de Verónica (Magario) que no la conozco mucho porque no tuve mucho trato. No se que hará de su vida, pero supongo que… siempre hay algún lugar”.

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QP.: Me refiero a lo político. Esto plantea una división en el peronismo matancero que siempre ha sido el más fuerte en toda la provincia. Usted, más allá de ganar o no la elección, después de las elecciones, ¿va ir por la conducción del PJ de La Matanza?

J.L.: “Yo creo que la conducción del peronismo no significa ocupar un lugar una sola persona. Me parece que hay que llegar con el consenso de todos, que es lo que hay que buscar. Hay que trabajar para dos cosas que son vitales para el funcionamiento institucional no solamente de La Matanza sino el país. La unidad monolítica del movimiento obrero y la unidad y el consenso. La unidad consensuada del peronismo o el partido justicialista. Me parece que todos vamos a hacer un alto en la huella y vamos a replantear todo. Seguramente, como peronistas que somos, no podemos ser gobierno, alternativa y oposición. Eso somos hoy el peronismo. Porque la política se ha dogmatizado, las ideologías quedaron de costado. Ningún partido hace su defensa en la legislatura, que yo he participado, desde el punto de vista ideológico. Lo hace desde el punto de vista de conveniencia. ‘Te voto tal cosa si me votás tal cosa’. ‘Te aprueba tal cosa en comisión si vos me aprobás lo otro’. Se hace lo que el de arriba manda. No hay conductor, palabra santa es lo que dice porque no hay debate. Ese es el dogma de la política. El Frente para la Victoria tiene una política dogmática total. Como consecuencia, los demás partidos también lo han hecho”.

 

QP.: Para terminar, sé que está muy ocupado y le agradezco el tiempo que nos ha dedicado, usted ha caminado el distrito en esta campaña y seguirá haciéndolo hasta octubre. Más allá de lo que ha hablado con los vecinos en cuanto a las necesidades que le plantean en sus barrios, ¿cómo ve le estado de ánimo del matancero?

J.L.: “Mirá, me hiciste una pregunta que la verdad es clave, que me provocó mucha preocupación. Me pasó y te voy a nombra un barrio nada más, Don Juan. No hay peor cosa que ver a un ciudadano casi perder su integridad porque está absolutamente entregado, resignado a lo que tiene, a lo que le falta o a lo que no tiene y es tristísimo. Justamente estaban volcando un camión del municipio ahí en barrio Don Juan y un montón de familias estaban juntando cosas para reciclar y comida para comer. Y yo andaba con una señora y le decía: ¿Por qué no tratan de buscar otra oportunidad?’ Y me dice: ‘No, a mí me pagan dos planes universales y yo lo único que quiero es si usted me manda un camioncito de tosca para cuando venga el agua, yo hago una muralla ahí’. Mire el estado de resignación. Ese estado de resignación de esta mujer y toda su familia creo que es el estado de resignación de los matanceros. Hay algunos que no, obviamente. Luchan y tratan de crecer. El grueso de La Matanza está resignada y es triste porque yo digo: ‘puedo ganar, perder… lo que no puedo hacer es no participar’. Porque yo después no me puedo lavar las manos diciendo: ‘y mirá como gobierna y yo no hice nada’. No. Yo le hice oposición siempre y cuando hasta que pude. Y podía haber arreglado absolutamente con todos. Y podía haber sido el candidato del oficialismo y ganarlo con el oficialismo. Del oficialismo, del macrismo, todo. Pero yo mantuve una línea de conducta, soy fiel a mi concepción, mis condiciones son las condiciones de cualquier hombre bien parido que quiere lo bueno para su pueblo e ideológicamente soy peronista. Y el peronismo es profundamente cristiano, socialmente justo. Nosotros tenemos que volver a la solidaridad del peronismo. Volver al peronismo. Esta es la verdad”.

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QP.: La última, un mensaje para los matanceros.

J.L.: “Que en esta oportunidad no se dejen robar su voto. Que vayan a buscar el voto que van a emitir a los lugares que lo dan, a los distintos centros políticos que hay. Si tengo la oportunidad de ser el intendente de La Matanza no solamente voy estar orgulloso yo sino que voy a enorgullecer a los ciudadanos que represento, cumpliendo lo que prometí en mis propuestas para La Matanza. No va a haber nada que me cause mayor satisfacción que eso. Obviamente que les pido que confíen en mí a través de su voto y que vayan previamente a retirar la boleta para que nunca más ocurra lo que pasó en las PASO donde las mesas estaban sin la boleta de Julio Rubén Ledesma”.