LAS TRUCHOMANÍAS DE DON FRESCO Y ZARACHO
La impunidad, la angurria, la soberbia se ha convertido en moneda corriente con la que se manejan algunos funcionarios matanceros cuando tienen como único objetivo hacer valer lo que ellos quieren. No les importa nada, no hacen las cosas para mejorar los servicios que presta el municipio a los vecinos matanceros; hacen y deshacen con el fin determinado de obtener beneficios para ellos y sus secuaces.